3.3 - El horror de la guerra.

- COMIENZA LA GUERRA.

Durante los meses de marzo, abril y mayo de 1992 se produjeron feroces ataques en el este de Bosnia así como en la parte noroeste del país. La situación llegó a un punto insostenible. Los serbo-bosnios asediaron Sarajevo. Toda la población fue tomada como rehén y comenzó a sufrir un acoso brutal por parte de francotiradores y bombardeos indiscriminados de la artillería situada en los montes circundantes. Tan solo un túnel subterráneo que pasaba por debajo de la pista del aeropuerto, en manos de soldados de la ONU de Francia, Egipto y Ucrania, unía la parte bosnia libre con los asediados dentro de la capital. Túnel que conoceremos en nuestra visita a Sarajevo.

Cerco de Sarajevo. Foto del autor en el Museo de la Vida. Sarajevo.

- LOS TERCIOS VUELVEN A EUROPA. AGT MÁLAGA.

El gobierno español decidió el 18 de agosto de 1992 la participación española en el conflicto de los Balcanes. Se mandó al primer contingente, la Agrupación Táctica Málaga, compuesta mayoritariamente por legionarios del 4º Tercio de la Legión.
La principal misión de nuestros soldados sería abrir la ruta del Neretva. Esta partía desde Split, en la costa croata, recorría Metkovik en la desembocadura del Neretva, Mostar y llegaba hasta Jablanica, localidad asentada entre las inmensas moles pétreas de los Balcanes y paso obligado en la carretera que terminaba en Sarajevo.

Ruta alternativa (Gannet) en las proximidades de Jablanica. Diciembre del 93. Foto del autor.

Ruta Gannet, llegando al puente de Bijela.
Año 93. AGT Madrid.

Ruta Gannet. Bella estampa del Neretva. 
Bosnia es una tierra maravillosa.
Año 93. AGT Madrid.

 

Ruta Gannet. Por caminos de montaña
recorremos los Balcanes junto al río
Neretva. Año 93. AGT Madrid.

La ruta Gannet recorriendo los Balcanes.
Año 93. AGT Madrid.

A lo lago de esta ruta (llamada Gannet) vivían mas de 1 millón de personas. Era vital hacer llegar los suministros desde los puertos del Adriático hasta las ciudades de Mostar y Sarajevo.

La situación en la región asignada al contingente español era de guerra abierta entre serbios y la alianza bosnio-croata. Nuestros soldados se encargan de tareas de mediación e interposición entre combatientes, teniendo como primer objetivo la protección de civiles. El dominio inicial serbio estaba siendo rechazado en Herzegovina y las tropas serbias habían sido expulsadas de Mostar. 

Puente Viejo de Mostar, Stari Most, poco antes de su destrucción por el HVO croata.

En su retirada los serbios destruyeron la catedral católica, 14 mezquitas, el monasterio franciscano, y el palacio arzobispal con su biblioteca de más de 50.000 libros. En respuesta, las milicias del HVO croata destruyeron la catedral ortodoxa y el monasterio de Zitomilnichi.
El cuartel general de la agrupación Málaga se asienta en Medjugorje. La Bandera de la Legión en Dracevo con destacamentos en Jablanica, Kiseljak y Kresevo. La unidad de apoyo en Divulje, cerca del aeropuerto de la ciudad portuaria de Split, por donde llegan los suministros desde España.

Avda. de los Francotiradores, centro de Mostar, futura plaza España. Año 1993. Foto de José Pascual.

- LLEGA LA AGT CANARIAS.

Tras esta primera agrupación llegó su sustituta, la Canarias, con legionarios del Tercio de Fuerteventura. Comenzaron su misión el 19 de abril de 1993.
En los acuerdos de paz de Graz (Austria) firmados por Mate Boban líder radical de la República Croata de Herzegovina y Radovan Karadzic de la República de los serbios de Srbska en Bosnia, se pactó repartirse el territorio de la república de Bosnia sin contar con los musulmanes. En cuanto se dió a conocer dichos acuerdos, la alianza entre bosnio-croatas y bosniácos musulmanes fue degradándose hasta acabar estallando en conflicto abierto.
A su llegada, la AGT Canarias tuvo que adaptarse a la tensión creciente entre musulmanes y croatas. Los check points del HVO croata se hicieron muy numerosos dificultando aún más, la ya de por si complicada circulación de los convoyes de ayuda humanitaria.

Miliciano del HVO apartando minas antitanque de la carretera. Un convoy español espera. Foto de José Pascual.

A primeras horas del 9 de mayo de 1993, el HVO se hizo con el control de todas las carreteras que conducían a Mostar.
El Consejo Croata de Defensa inicio un bombardeo planificado sobre la ciudad que redujo la mayoría de su parte antigua, la oriental, a ruinas. Mostar se dividió en dos zonas, la zona oeste controlada por los croatas del HVO y la zona este controlada por el ejército de la república de Bosnia, la Armija.

A la izq. de la línea roja que representa el frente de batalla, el Mostar bosnio, a la dcha el Mostar
croata. En medio, la mole del monte Hum, en manos croatas, y que era una plataforma artillera
inconquistable para machacar la zona bosnia. 

Vista desde el monte Hum de la línea del frente (raya roja) a la dcha se encuentra la zona
musulmana, a la izquierda el Mostar croata. Desde aquí los milicianos del HVO croata 
tenían una visión perfecta de toda la parte bosnia de Mostar. Marzo del 94. Foto del autor.

 Dió comienzo un largo asedio con bombardeos continuos, ejecuciones, limpieza étnica y refugiados. En medio de esta ofensiva, el 11 de mayo, el contingente español sufrió la primera baja de las 23 que en total tuvimos los españoles. Cayó herido por fuego de mortero el teniente Arturo Muñoz Castellanos del Tercio "Duque de Alba", mientras transportaba sangre y medicinas para el hospital bosnio de Mostar. Trasladado a España, moriría de sus heridas en el hospital madrileño Gómez Ulla. Fue el primer caído español en misiones de paz. D.E.P. Siempre con nosotros.

Primer caído español en Bosnia, en total serían 23 los militares que dejaron su vida en la misión.

Además de las misiones que desarrollaba, la AGT tuvo que asumir la tarea de interposición entre las 3 partes combatientes.
Todos los puentes de la ciudad de Mostar habían sido destruidos por la artillería serbia. Solo quedaba el símbolo de la ciudad, el Stari Most, el Puente Viejo que, construido por orden de Suleiman el Magnífico, dio nombre a la ciudad en el S.XVI.
La guerra se desarrollaba en mayo con virulencia, afectando a las tropas españolas, que en numerosas ocasiones recibían fuego de mortero, ametralladora y armas ligeras durante sus misiones de escolta de convoyes.

El autor patrullando por la zona croata de Mostar. El edificio 
era el centro comercial más grande de la ciudad. Desde sus
pisos altos los francotiradores del HVO croata alcanzaban
las calles de la zona bosnia de la ciudad no respetando ni a 
mujeres ni a niños. Foto del autor.

Efectos en un camión de ayuda humanitaria de la metralla de una granada de mortero. Jablanica 1994. Foto del autor.

 Esos combates hicieron intransitable la ruta del Neretva ya que destruyeron el puente de Bijela. Con el esfuerzo de zapadores, logística y todos los medios disponibles se consiguió habilitar una "ruta alternativa" que evitaba la carretera nacional que discurría sobre el Neretva para adentrarse por plena montaña. Una ruta mucho más dura y agotadora, con una pronunciada pendiente que terminaba en el puente de Dreznica. Los soldados españoles fueron capaces de mantener abierta hasta que llegó la paz.


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