miércoles, 24 de octubre de 2018

12.11- BALI (I). KUTA LA PLAYA MÁS TURÍSTICA DEL SURESTE ASIÁTICO.

27 de septiembre de 2016. Martes.
Yogyakarta. Isla de Java. Indonesia.



Un día precioso me saluda cuando despierto en el hotel de Yogyakarta, aunque se nublara con el paso de la mañana. Hoy tengo un par de horas antes de dirigirme al aeropuerto de la pequeña y coqueta capital de Java Central. Aprovecho para disfrutar del jardín del Puri Pangeran, en él se sirve el desayuno. Me despido de este establecimiento donde me han tratado genial, su personal es muy amable, siempre sonrientes y dispuestos a ayudar. Muy recomendable si os dejáis caer por esta isla.


Una flor de agua en el jardín
del Puri Pangeran se cierra
cuando se hace de noche.
Yogyakarta. Isla de Java.
Indonesia. Foto del autor.
La misma flor se abre a los primeros
rayos de sol de la mañana.
La naturaleza es sabia.
Yogyakarta. Isla de Java.
Indonesia. Foto del autor.


























El jardín del hotel Puri Pangeran, un oasis de relajación y paz en Yogyakarta.
Isla de Java. Indonesia. Foto del autor.


Arroz, café, fruta y tostada con mermelada y mantequilla.
EL desayuno de los campeones antes de volar a Bali.
Yogyakarta. Isla de Java. Indonesia. Foto del autor.


Nos ponemos en marcha hacía el aeropuerto de Yogyakarta. Lo tenemos a unos 10 kms, con el tráfico
de la pequeña capital de Java Central tardaremos una media hora.
Isla de Java. Indonesia. Foto del autor.

Pido un taxi y recorro por última vez las calles de Yogyakarta, una ciudad en la que aún se disfruta, sin prisas, del tranquilo transcurrir del tiempo. Hasta aquí aún no ha llegado el estrés del día a día de las grandes metrópolis asiáticas. La naturaleza que la rodea, sus joyas arquitectónicas e históricas, sus habitantes y su tranquilo modo de vida hacen de Yogya un lugar delicioso. 


El tráfico en Yogyakarta como en todo el sureste asiático, es todo un espectáculo.
Yogyakarta. Isla de Java. Indonesia. Foto del autor.


El pequeño aeropuerto de Yogyakarta se encuentra a las afueras de la ciudad y enlaza diferentes puntos de Indonesia, como Yakarta su capital, Lombok y el destino más utilizado por los viajeros que salen desde Java Central, el Ngurah Rai de la isla de Bali.


Esta lampara en el aeropuerto de Yogyakarta me llama la atención.
Es la que podríamos encontrar en la mayor parte de salones
y casas de medio mundo. Isla de Java. Indonesia.
Foto del autor.
Rumbo a mi próximo destino, la mítica isla de Bali. Cojo mi Pegaso alado, como casi siempre
que me he movido en esta Escapada, Air Asia es la compañía de bajo coste con mejor calidad-precio
que he probado. Y además con una puntualidad excelente. Muy recomendable si os escapáis
por esta maravillosa región del mundo. Yogyakarta. Isla de Java. Indonesia. Foto del autor.



- LLEGAMOS A BALI. UN POCO DE HISTORIA.

Como os podéis imaginar, no soy el primer turista que llega a la isla de Bali y a sus conocidas playas occidentales. Ya en el 3.000 a.C. se cree que empezaron a poblarse estos arenales. Sus primeros pobladores debían de estar tan a gusto con su entorno natural, que se tomaron con calma el cambio de hábitos de vida, ya que no empezó a desarrollarse una sociedad organizada alrededor del cultivo del arroz hasta el S. IX d.C.


El autor en los evocadores campos de arroz del centro de Bali, cerca de Ubud.
Indonesia.


El hinduismo impulsó el desarrollo cultural en la isla, particularmente con la llegada, expulsados por el islam, de los reyes y cortesanos del asediado reino hinduista de Majapahit desde la vecina isla de Java. Precisamente, ese territorio recién conquistado por mercaderes y piratas seguidores de Mahoma en el S. XV, es Java Central, territorio que he descrito en mis dos anteriores artículos.
Este éxodo culminó en el año 1478 y fue el sacerdote Nirartha quién trajo a la isla muchas de las complejidades del hinduismo balinés.


El autor frente a uno de los altares que representa el panteón de dioses hinduistas balineses.
Templo de Pura Tirta Empul S. X-XII d.C. Isla de Bali. Indonesia.


En el S. XIX los holandeses empezaron a formalizar alianzas con los príncipes del norte de Bali. Una disputa sobre el saqueo de barcos naufragados fue el pretexto que usó Holanda para invadir el sur de la isla en 1906. Dicha lucha finalizó cuando la nobleza de Denpasar quemó sus palacios y vestidos con sus mejores galas, kris en mano (dagas doradas tradicionales) se lanzaron de forma suicida contra los cañones holandeses.
En 1930 empezaron a llegar los primeros turistas propiamente dichos, eran occidentales por supuesto. Pero la eclosión de este "maravilloso invento" que es el turismo comenzó en 1970, propiciando muchos cambios en la isla. Ayudó a mejorar las carreteras, las telecomunicaciones, la salud y la educación en toda Indonesia.


Es muy difícil resistirse a una auto-foto frente a este mar turquesa. Playa de Kuta.
Isla de Bali. Indonesia.


Sin embargo, aún a costa del turismo de masas que cada año desembarca en la isla, (4 millones) la singular cultura de Bali a sabido sobrevivir, gracias a una sorprendente resistencia a influencias extranjeras. El amor de los balineses por sus tradiciones nos permite disfrutar de todas las joyas arquitectónicas, naturales y etnográficas que espero poder mostraros en los próximos artículos. Una maravilla de Escapada, uno de los lugares más recomendables para perderos, consejo de este que suscribe.



- PRIMER CONTACTO CON BALI. PLAYA DE KUTA.

Kuta es, administrativamente hablando, un distrito del sur de Bali. Este antiguo y pequeño pueblo de pescadores se convirtió de la noche a la mañana, de la década de los 70 a la actualidad, en el principal destino turístico de Indonesia y uno de los más conocidos del mundo gracias a su inmensa playa de arena. Esta zona, gracias a su cercanía con el aeropuerto (el extremo sur de la playa de Kuta termina justo en la pista del aeropuerto) su amplia oferta de hoteles, restaurantes e instalaciones turísticas de precio económico, hace que muchos viajeros con presupuesto reducido elijan este lugar para pasar sus vacaciones.


Típica estampa de la playa de Kuta en Bali. Indonesia. Foto del autor.



Típica estampa de la playa de Kuta. Bali. Indonesia. Foto del autor.


Playa de Kuta. ¿Donde están los turistas? en las piscinas de sus hoteles, a escasos 100
metros de estas maravillosas playas. Bali. Indonesia. Foto del autor.
¿El paraíso del sureste asiático está en Bali? muchos piensan que sí. Yo opino que es uno
 de los lugares más cercanos al Paraíso que he tenido el placer de conocer.
Playa de Kuta. Isla de Bali. Indonesia. Foto del autor.


El extremo sur de la playa de Kuta termina en la propia pista del aeropuerto de Bali.
En el extremo izquierdo de la foto vemos como acaba de aterrizar un vuelo.
Indonesia. Foto del autor.



Durante kilómetros podemos andar con la playa de arena blanca de Kuta a la izquierda
y los complejos hoteleros y sus inmensas piscinas a la derecha. Estas últimas llenas
de turistas, la playa practicamente vacía. Isla de Bali. Indonesia. Foto del autor.

Al norte de la playa de Kuta se encuentra Legian, un lugar donde se arremolinan australianos de una manera que no se parece nada a la de cualquier localidad costera de la gran isla-continente. Y aún más al norte está Seminyak, zona ostentosa y cara con una playa tan ancha y blanca como la de Kuta pero con menos gente.

La Jl (calle) Legian es la calle-avenida-boulevar que recorre paralelamente la playa de Kuta, entre esta avenida y la playa nos encontramos con una maraña de callejuelas llenas de cientos de hotelitos, puestos de recuerdos, warungs/restaurantes indonesios, bares, solares en construcción, negocios de alquiler de coches y motos e incluso algún palmeral que otro que desafía el paisaje imperante.


Comienza mi paseo junta a la playa de Kuta desde el extremo sur. Un inmenso paseo de
kilómetros de longitud bordea el arenal. A la izquierda la playa, a la derecha los complejos
hoteleros con inmensas piscinas y hasta helipuertos. Isla de Bali. Indonesia.
Foto del autor.


Barcas de pesca balinesas sobre las turquesas aguas de la playa de Kuta.
Isla de Bali. Indonesia. Foto del autor.


Barcas balinesas frente a la playa de Kuta. Isla de Bali. Indonesia. Foto del autor.

Barcas balinesas en la playa de Kuta. Isla de Bali. Indonesia. Foto del autor.





- NOS VAMOS A UBUD. EL CORAZÓN DE LA ISLA DE BALI.

Tras pasar la tarde paseando por la playa de Kuta, me dirijo a mi hotel en Ubud, el Biyukukung Suites and Spa. Un auténtico paraíso en el corazón de Bali, y sin duda, el mejor hotel donde me he alojado a lo largo de mi vida recorriendo Asia y Europa. Sé que hay hoteles más caros, con más hectáreas de jardines, con grandes piscinas y lujosos salones con mármoles y lamparas inmensas. Pero todo ese fasto no puede superar el encanto de este lugar. Las imágenes hablan por si solas.


La entrada a mi alojamiento en
el Biyukukung, dos pisos. Arriba
la cama con dosel abajo el
recibidor y el inmenso baño.
Ubud. Isla de Bali.
Indonesia. Foto del autor.
Mi habitación en el hotel Biyukukung. La vista del campo de
arroz al amanecer es una maravilla. Ubud. Isla de Bali.
Indonesia. Foto del autor.























Voy a dedicar una parte del artículo para recomendaros este magnífico establecimiento hotelero. Está perfectamente integrado en el paisaje, tanto su jardín central, que está formado por terrazas donde los trabajadores del hotel cultivan el arroz que luego sirven en el propio hotel, como los pequeños adosados que imitan las cabañas de los antiguos poblados balineses o el canal de agua con peces vivos que pasa por delante de las villas donde nos alojamos. Una maravilla en el corazón de la isla más hermosa de Asia.



La vista del campo de arroz del hotel desde la cama de la habitación es un sueño
asiático hecho realidad. Ubud. Isla de Bali. Indonesia. Foto del autor.








Sobre el dosel de la cama se
alza el techo de la cabaña
hecho de bambú y cañas.
Ubud. Isla de Bali. Indonesia.
Foto del autor.
El pequeño arroyo de agua que recorre las entradas
de las villas del hotel está lleno de peces. Ubud.
Isla de Bali. Indonesia. Foto del autor.





Uno de los rincones del hotel Biyukukung. Cada esquina es una fotografía con encanto.
Ubud. Isla de Bali. Indonesia. Foto del autor.
Piscina entre las cabañas-suites del hotel Biyukukung en Ubud. Isla de Bali.
Indonesia. Foto del autor.
Vista desde la cafetería de la
piscina del campo de arroz y
de mi apartamento en el
hotel Biyukukung. Ubud.
Isla de Bali. Indonesia.
Foto del autor.
El hotel Biyukukung es un auténtico
paraíso en la isla de Bali.
Indonesia. Foto del autor.
























Me decidí por el interior de Bali para alojarme por varias razones: alejarme del bullicio del turismo de masas anglosajón de la playa de Kuta y conocer mejor el modo de vida de los auténticos balineses, sus templos, sus mercados, su cultura, sus maravillas naturales y sus costumbres ancestrales. 
Poco a poco a lo largo de varios artículos voy a intentar mostraros una parte de esta isla de Indonesia, que se diferencia del resto del país principalmente por la hospitalidad que ofrecen sus habitantes tanto al viajero independiente como al turista de masas más ortodoxo.
Tras terminar de recorrer el hotel, coloco mis cosas, me doy una ducha y me dispongo a cenar en Ubud. Ya ha caído la noche y mis pasos se encaminan a visitar uno de los templos gastronómicos de la isla. El restaurante Bebek Bengil (pato sucio en indonesio), desde 1990 ofrecen su especialidad, pato satay y pato ahumado (este hay que pedirlo el día antes). El plato principal es pato crujiente con patatas salteadas y ensalada o arroz blanco o amarillo al vapor (infusión de cúrcuma) y verduras de Indonesia.


El restaurante Bebek Bengil en Ubud, un delicioso lugar en mitad de un jardín que imita la
selva balinesa. Las mesas son pequeñas cabañas elevadas sobre el terreno hechas de
madera y con cojines para sentarse. Hay que dejar los zapatos fuera antes de subir.
Cultura balinesa en todos los sentidos. Isla de Bali. Indonesia. Foto del autor.
De primero calamares rebozados con harina con una salsa de especias balinesas.
Restaurante Bebek Bengil. Ubud. Isla de Bali. Indonesia. Foto del autor.
Nasi campur, pollo salteado con curry de carne de vacuno, verduras salteadas y arroz blanco.
Un clásico de la cocina balinesa. Restaurante Bebek Bengil. Ubud. Isla de Bali. Indonesia.
Foto del autor.
La mesa en madera noble se encuentra en una tarima que imita una cabaña balinesa, y a nuestro
alrededor un maravilloso jardín que imita la selva de la isla. Una delicia el Bebek Bengil en Ubud.
Isla de Bali. Indonesia. Foto del autor.



Ceno en uno de los restaurantes más característicos de la isla algunos de los platos más conocidos de la gastronomía balinesa. De primero; cumi goreng bumbu bali, calamar rebozado en harina con salsa de especias balinesas (aunque nada que ver con las rabas de Cantabria) y de segundo; pollo salteado con curry, verduras y arroz blanco (nasi campur). Delicioso. De postre una tarta casera de chocolate que no pude dejar pasar. 
Muy recomendable y los precios muy asequibles, desde los platos más baratos 50.000 rupias (3 euros), a los mas caros 130.000 rupias (7,80 euros). No podéis dejar de visitar este lugar, al menos para disfrutar de una cena con muchísimo encanto. Gracias a su cuidado jardín y la belleza de sus árboles sientes que estas en medio de la selva balinesa.
No dejéis de pasaros por aquí una noche si os alojáis en Ubud.

Mañana empezare a mostraros los encantos del centro de la isla. Ubud y sus maravillas se mostraran ante nosotros para demostrarnos que, naturaleza, costumbres ancestrales y turismo de masas pueden ser compatibles.


Buenas noches Bali.


Próximo post: 12.12- Bali (II). Templos, cascadas, campos de arroz. Ubud, bienvenidos al Bali más auténtico.

jueves, 11 de octubre de 2018

13.5- FUERTEVENTURA, UNA ISLA POR DESCUBRIR. (I)

10 de septiembre de 2018. Lunes.
Corralejo. Fuerteventura.


Desde este punto, en el norte de la isla de Fuerteventura, se observa la pequeña isla de Lobos cuyos 2 kilómetros cuadrados forman del Parque Natural del Islote de Lobos. A su lado, se encuentra la costa sur de la isla de Lanzarote, las tres islas, casi pegadas, forman una imagen única. Como un triángulo de piedra separado por el océano.


Al fondo de la foto se ve la montaña de la isla de Lobos desde los tejados de Corralejo.
Hay un pequeño brazo de mar de dos kilómetros de largo entre la costa norte de Fuerteventura
y este pequeño islote. Islas Canarias. Foto del autor.


En Corralejo estableceremos la base para nuestro recorrido por la isla. Esta pequeña población de 16.000 habitantes es uno de los núcleos turísticos más fuertes de Fuerteventura, cuenta con extensas playas de arena fina y más de 2.600 hectáreas que forman el Parque Natural de Corralejo, las famosas Dunas de Corralejo. Por desgracia para nosotros y muchos otros visitantes, estas semanas las mantienen cerradas por el rodaje de la película Wonder Woman II. Una pena, ya que lo ideal es recorrerlas en coche e ir parando donde te apetece para disfrutar de las vistas del mar desde las dunas de arena blanca.


Vista del islote de Lobos desde las Dunas de Corralejo. Fuerteventura.
Islas Canarias. Foto del autor.



Hasta aquí se puede llegar, es el inicio del Parque Natural de las Dunas de Corralejo.
A partir de la rotonda el espacio público se convierte por la magia del dinero en zona
privada durante semanas, para el rodaje de una película americana. Fuerteventura.
Islas Canarias. Foto del autor.


- FUERTEVENTURA.

La isla está situada a 97 kilómetros de la costa noroeste del continente africano. El 26 de mayo de 2009 fue declarada en su totalidad reserva de la biosfera por la UNESCO. Su población es de 110.000 habitantes, siendo la la segunda isla en extensión de todo el archipiélago y la cuarta más poblada. Desde el punto de vista geológico es la más antigua de todas las islas canarias y tiene 24 volcanes, entre conos volcánicos, un respiradero y calderas. Su clima es árido y se divide en zonas de clima desértico y zonas de clima subtropical árido. La temperatura es contante todo el año, no bajando de los 21ºC.

En la zona central se encuentra el macizo de Betancuria, con una cota máxima de 762 mts. en el Pico de la Atalaya, que visitaremos en nuestra ruta. Al sur se hallan el itsmo de la Pared y la Península de Jandía, con el Pico de la Zarza a 807 mts. de altitud. Este último es el monte más elevado de la isla. El ser una isla relativamente llana y con montañas muy bajas tiene como consecuencia la casi nula retención de nubes y por tanto prolifera el clima desértico y el subtropical árido en todo el territorio. En este artículo recorreremos una parte del norte y el centro de la isla, las maravillosas playas del sur las dejaremos para otra Escapada.


Valle de Betancuria desde la carretera que recorre su montaña. Fuerteventura. Islas Canarias.
Foto del autor.
La longitud de costa de Fuerteventura es de casi 326 kilómetros, de los cuales 77 son de playa, lo que la sitúa en segunda lugar en cuanto a longitud del litoral, tras Tenerife, y en primer lugar en lo que respecta a perímetro de playas de las islas. En torno a las 2/3 partes de las playas de Fuerteventura son largas y de arena blanca o negra, siendo el resto de cantos rodados o mezcla de cantos y arena. Pájara, al sur, cuenta con 136 kms. de costa. En el municipio se encuentran las playas de la Península de Jandía, las más extensas de Canarias, que van desde Costa Calma, pasando por Esquinzo-Butihondo, Morro Jable y el Puertito de la Cruz, hasta la Punta de Jandía, por la zona de Sotavento y desde la Punta de Jandía, pasando por Cofete hasta La Pared, por la zona de Barlovento. Al norte, con 90 kms. La Oliva es el segundo municipio en longitud de costa de la isla, donde destacan las dunas de Corralejo, El Cotillo con sus dos playas y diferentes calas y la de Majanicho.



Playa de El Cotillo. Al noroeste de la isla. Fuerteventura. Foto de Araceli Hidalgo.

La costa está jalonada por varios faros, entre los que destaca el Faro de la Entallada (en la costa sureste) por su arquitectura y por sus 196 m. de altitud sobre el nivel del mar, que lo convierten en uno de los más elevados de las islas.



FUERTEVENTURA. UN POCO DE HISTORIA.

Las Islas Canarias ya eran conocidas por los navegantes fenicios en el I milenio a.C. Guardaban como secreto de estado la ruta hacía este archipiélago, ya que en las islas hallaron los moluscos gasterópodos con el que producían el tinte natural de color púrpura que era símbolo de nobleza, poder y riqueza. Estos habilidosos marinos y espabilados comerciantes vendían la púrpura a precio de oro por todo el Mediterráneo y el Atlántico conocido. En el 1.100 a.C. ya tenían factorías en Gadir (Cádiz), en Lixus (Larache) y Mogador (costa atlántica de Marruecos). La llamada "Púrpura de Tiro", la más preciada y cara era producida por la Stramonita haemastoma, muy abundante en las islas orientales de Canarias como se ha constatado paleontológicamente. Con la fundación de Cartago (Túnez) por lo fenicios en el 814 a.C. el comercio de la púrpura fue pasando paulatinamente a sus manos. Tras la caída de Cartago en el 146 a.C. los romanos sustituyeron a los cartagineses e impulsaron el comercio de la púrpura gracias al dominio de las factorías, infraestructuras y tintorerías que antes pertenecieron a fenicios y púnicos. Es en este momento cuando las Islas Canarias se empiezan a llamar las Islas Purpurarias y más tarde, las Fortunatae Insulae (Islas Afortunadas), precisamente por la producción de este producto, ya que la diosa de la Fortuna siempre apoyaba a los poderosos, únicos capaces de portar la púrpura en sus tejidos. Según la obra de Plinio el Viejo (23-79 d.C.) a Fuerteventura ya la llamaban Planasia.




Molusco del que se extrae la tan
codiciada púrpura y que hizo de
las islas orientales canarias, un
lugar codiciado por las potencias
de la época antigua.


En el planisferio de Angelino Dulcert de 1339 ya aparece mencionada como Forte Ventura, toponimia que irá cambiando durante el S. XIV para pasar a escribirse junto.
El nombre indígena de la isla antes de la conquista en el S. XV era Erbania, estaba dividida en dos comarcas, Jandía y Maxorata, de donde proviene el gentilicio majorero que da nombre a los habitantes de la isla.
Estos habitantes tienen un origen bereber, llegados en el primer milenio antes de Cristo. Posiblemente descendientes de los cientos de esclavos que trajeron tanto fenicios como  romanos a la isla para trabajar en el campo y sus factorías.
Entre la caída del imperio romano en occidente (476 d.C.) y la conquista por parte del Reino de Castilla, ya se conocía la existencia de estas islas. Podemos especular con que el imperio bizantino desde sus posiciones en la provincia de Spania (en el sur de la península) entre el S. VI y VII, conquistadas por Justiniano I, tenía rutas con las islas afortunadas, ya que heredarían los conocimientos de sus "primos" de Roma. Estos territorios incluían la ciudad de Septem (Ceuta).


Mapa de la isla de Fuerteventura de Don Tomás López (1779) Geógrafo de los Dominios de S.M.,
de las Reales Academias de la Historia, de San Fernando, de la de Buenas Letras de Sevilla
y de la Sociedad Bascongada de los Amigos del País.
 Foto de la Biblioteca Digital de la Real Academia de la Historia.


Además hubo expediciones por parte de piratas mallorquines, aragoneses, portugueses y genoveses en busca de esclavos que luego venderían en sus territorios o en el norte de África.
Pero la conquista definitiva de la isla comienza en el 1402 comandada por los normandos Jean de Bethencourt y Gadifer de la Salle. Tras asentarse en Lanzarote con 63 marineros (de los 263 iniciales, las deserciones fueron muy numerosas), comienza las primeras incursiones en la isla vecina de Fuerteventura.
En 1404 fundan Betancuria, el valle se convierte en el primer asentamiento de la isla y posteriormente su capital. En 1405 la isla es conquistada tras un período de convivencia entre isleños y conquistadores, Fuerteventura tenía unos 1.200 habitantes. La iglesia de Betancuria se erige en 1410 en honor a Santa María. En 1476 el territorio pasa a ser Señorío Territorial de Fuerteventura, dependiente de los Reyes Católicos.


Bellísima la estampa de la plaza de la iglesia de Santa María de Betancuria.
Uno de los lugares con más encanto de Canarias y de toda España. Te sientes
en la plaza de un pueblo del S. XV. Una maravilla. Betancuria. Fuerteventura.
Islas Canarias. Foto del autor.



Foto del autor sobre un panel explicativo en el ayuntamiento de Betancuria.
Fuerteventura. Islas Canarias.



Actual ayuntamiento de Betancuria. Antigua Casa de Los Manrique. Betancuria. Fuerteventura.
Islas Canarias. Foto del autor.



Plano de la Betancuria histórica. Foto del autor sobre un panel informativo en la plaza
de la iglesia de Betancuria. Fuerteventura. Islas Canarias.


Desde entonces la isla sufre el acoso de incursiones piratas. En 1593 una expedición berberisca invade la isla arrasando la capital. Para evitar esto se construyen varios castillos a lo largo de la costa, a la par que la población se aleja de la misma, exactamente igual que en todo el litoral mediterráneo de la península. Por estas fechas llega el primer Capitán General que se hace cargo de la defensa de la isla en nombre de la corona.
El Regimiento de Milicias se crea en 1708, y su coronel asume las competencias de Gobernador de las Armas, cargo de carácter vitalicio y lo que es más importante, hereditario, que hace de la familia Sánchez-Dumpiérrez la más poderosa de la isla.



Una de las torres erigidas en la costa majorera. El castillo de Buenaventura se encuentra en
Caleta de Fuste. Fuerteventura. Islas Canarias. Foto de Araceli Hidalgo.


En 1739 estalla la guerra entre el Reino de Gran Bretaña y España y la isla vuelve a ser objetivo de ataques corsarios, capturando barcos cuyos botines venden en la isla de Madeira. El 13 de octubre de 1740 desembarca en Gran Tarajal un corsario inglés y saquea la zona de Tuineje y su iglesia. El Teniente Coronel Sánchez Dumpiérrez sale a su encuentro con lugareños reclutados a toda prisa y los derrota en la batalla de El Cuchillete matando a 33 de los 53 piratas desembarcados y capturando al resto, enfrentamiento de gran mérito para los isleños, ya que estos solo van armados con palos y piedras. Al mes siguiente, el 24 de noviembre, 54 corsarios desembarcan en el mismo lugar y con las mismas intenciones. Esta vez se enfrentaron a una tropa más numerosa y mejor preparada (tenían algo de armamento moderno capturado en el anterior encuentro y se parapetaron tras varios camellos). Fue la batalla de Tamasite o del Llano Florido, donde los majoreros no hicieron prisioneros.


Escena de la batalla de Tamasite (1740). Pintado sobre tabla,
obra anónima (1880) que se encuentra en el Retablo Mayor de la
iglesia de San Miguel en Tuineje. Se observa claramente el
episodio de los camellos que los majoreros utilizaron como
escudos para acercarse al cuerpo a cuerpo contra los
piratas ingleses. Foto del autor en el Museo de La Casa
de los Coroneles. La Oliva. Fuerteventura.


Patio interior de La Casa de los Coroneles. La Oliva. Fuerteventura. Foto del autor.

Los coroneles de la familia Cabrera-Bethencourt trasladan su residencia de Betancuria a La Oliva en 1742 estableciéndose en la llamada Casa de los Coroneles. Son unos tiempos en los que el poder de los señoríos va decayendo y poco a poco, estos mandos militares, que se encargan de la protección de la población van asumiendo el poder civil, nombrando o destituyendo cargos del cabildo.
En 1812 las Cortes de Cádiz abolen los señoríos pasando la isla de Fuerteventura a integrar la provincia española de Canarias. Otra de sus disposiciones es convertir en municipios las antiguas parroquias existentes, así nacen: Antigua, Betancuria, Casillas del Ángel, La Oliva, Pájara , Tuineje y Tetir. En el año 1860 Puerto Cabras (actual Puerto del Rosario) pasa a ser capital de la isla sustituyendo a Betancuria.
En 1956 se cambia el nombre de Puerto de Cabras por Puerto del Rosario aprobado en Consejo de Ministros.
Durante los años 60 muchos majoreros emigran a las otras islas y al Sahara y la capital va creciendo con la llegada de gente de los pueblos de interior. En 1969 se inaugura el nuevo aeropuerto de El Matorral.
Tras la muerte de Franco y la descolonización de el Sahara en 1975, el Tercio Don Juan de Austria 3º de La Legión al mando del Coronel Pallás, llega a Puerto del Rosario permaneciendo hasta 1995.
La actividad económica principal de la isla es el turismo. En los últimos años la isla se ha dotado de complejos hoteleros y zonas turísticas que han impulsado notablemente el sector servicios. 
En 2012 Fuerteventura recibió la medalla de oro del Quality Coast Gold Award, premio internacional que distingue la calidad medioambiental costera para un turismo sostenible.



- COMIENZA NUESTRA RUTA. CORRALEJO-PLAYA DE EL COTILLO.

Desde la zona norte de la isla nos ponemos en marcha para visitar una de las playas más conocidas y con más encanto de la isla, El Cotillo. Lo mejor para perderse por las maravillas de Fuerteventura es alquilar un coche y dirigir vuestros pasos hacía los lugares que más os atraigan. Nosotros en esta pequeña escapada intentaremos conocer lo más característico del norte y centro de la isla. Dejando las maravillosas playas del sur para otra ocasión.


Preparados para iniciar la ruta por Fuerteventura en nuestro Fiat 500 de alquiler.
Foto de Araceli Hidalgo.


Para llegar a la playa de El Cotillo que se encuentra en la población homónima (1.289 habitantes), pasaremos por Lajares, un pequeño pueblo lleno de tiendas de surf, ropa playera y cafeterías. Os recomiendo parar en La Paneteca, una panadería/pastelería/cafetería que tiene un horno de pan espectacular del que sacan multitud de clases de panes deliciosos y muy sanos.
Una vez llegados a El Cotillo podemos visitar su paseo marítimo donde podremos ver el espectacular roque que preside su pequeño puerto marinero, ya conocido como fondeadero en 1599, el castillo del Tostón (1700), uno de los que se erigieron para defenderse del ataque de los corsarios y un antiguo horno de cal (1641).


Playa de Los Lagos en la población de El Cotillo. Fuerteventura. Islas Canarias.
Foto del autor.


La playa de El Cotillo se encuentra al norte de la población y se divide en dos, Los Lagos (a la que vamos a ir) y La Concha, más al norte. La de Los Lagos tiene una serie de pozas que la hace ideal para ir con niños, la arena es blanca y muy fina y el agua, como buenas playas del Atlántico que son, incluso en fechas tan veraniegas, esta muy fría.


La playa de El Cotillo un arenal para todos los gustos, zona de pozas, arena blanca, rocas y un mar
intensamente azul turquesa. Fuerteventura. Islas Canarias. Foto del autor.


Desde El Cotillo nos ponemos en ruta con nuestro pequeño Fiat 500 para visitar una de las poblaciones más antiguas de la isla. La Oliva.



- LA OLIVA. LA CASA DE LOS CORONELES.

La Oliva es una de las poblaciones más antiguas de la isla, un manuscrito anónimo dice que fue fundada en 1500 por los hermanos Hernández, procedentes de Betancuria. Como estas nuevas poblaciones quedan muy lejos de la capital, Betancuria, en 1711 se crea la parroquia de La Oliva. El tiempo pasa lento y aletargado hasta que algo cambia en La Oliva, en 1742 Los Coroneles trasladan su residencia de Betancuria a La Oliva. Es la época en la que el caudillismo feudal de los señoríos decae para ganar fuerza el poder militar, quitando y poniendo cargos del Cabildo Insular.
La Casa se levanta en la segunda mitad del S. XVII, destinada a ser la residencia oficial del "coronalato", poder que ejerció el dominio y protección militar sobre toda la isla. Se le atribuye a Ginés de Cabrera Bethencourt. El inmueble se diseñó tomando como ejemplo la vivienda doméstica canaria en los centros urbanos, propia de la Edad Moderna. Es monumento histórico-artístico desde 1979. 
La casa consta de dos plantas, la superior, de carácter residencial, albergaba las dependencias privadas del coronel y su familia y tenía también una pequeña capilla. La planta baja era más funcional, con despachos, cuadras, almacenes y demás dependencias de uso militar.
Fue restaurada en 2005 y actualmente alberga un pequeño museo, demasiado pequeño, podrían hacer algo mucho más espectacular, el edificio y la Historia de Fuerteventura lo merecen. 


Impone la mole de sobriedad de la Casa de los Coroneles. Con las dos torres de la
fachada principal como característica más acusada. Se puede visitar. 3 euros los nos
empadronados en las islas, 1 euro para los canarios y empadronados.
La Oliva. Fuerteventura. Islas Canarias. Foto del autor.



Puerta de entrada a la Casa de
los Coroneles. La Oliva.
Fuerteventura. Islas Canarias.
Foto del autor.
El esplendor de la época de los Coroneles
como dueños y señores de la isla.
La Oliva. Fuerteventura. Islas Canarias.
Foto del autor en el museo de la
Casa de los Coroneles.

La Oliva, durante los siglos XVIII y primeras décadas del XIX, con los Coroneles, pasa a ser en la práctica cotidiana la capital insular, aunque se mantiene el Cabildo, que representa el "poder civil y la capitalidad" en Betancuria. En esta época surgen extensiones de terrenos, destinadas a la producción de trigo, cebada y centeno para la exportación, con un buen número de jornaleros dependientes de la familia Cabrera (los Coroneles) y de sus administradores.


Vista desde la parte de atrás de la casa de los Coroneles del campo circundante donde se cultivaba
sobre todo cereales. La Oliva. Fuerteventura. Islas Canarias.
Foto del autor.
Parte trasera de la Casa de los Coroneles. Se aprecia perfectamente la montaña de La Oliva.
Fuerteventura. Islas Canarias. Foto del autor.








Interior de la casa de los Coroneles, su museo tiene muy pocas piezas para lo extenso de sus
salas, es una pena que no lo aprovechen mejor y hagan de este extraordinario edificio
un auténtico museo etnográfico e histórico de toda la isla de Fuerteventura.
Sales del edificio un poco decepcionado. La Oliva. Fuerteventura. Islas Canarias.
Foto del autor.
De gran trascendencia para los habitantes de La Oliva fueron las Cortes de Cádiz ya que abolieron los señoríos y dieron el poder al estado en todas las poblaciones de más de mil habitantes, pasando estas a ser municipios. Fue el principio del fin de los coroneles. Perderán el poder político-militar pero no el económico. El esplendor del municipio coincide con el poder de los Coroneles, hasta que en 1870 fallece el último de ellos y comienza la decadencia económica y política. Durante la primera mitad del S. XX el municipio pierde mucha población debido a la caída de la producción agrícola, su único sustento económico. unos se dirigirán a Puerto del Rosario, otros a Gran Canaria y Tenerife, los más a Venezuela y Cuba.      
Tras salir de La Casa, nos dirigimos a la plaza del pueblo para ponernos en ruta hacía el punto fuerte de nuestra Escapada. Ponemos rumbo a Betancuria.



- DE CAMINO A BETANCURIA.

Saliendo de La Oliva tomamos la FV-10 y nos dirigimos pasando por delante de la espectacular montaña de Tindaya, la montaña sagrada de los aborígenes majoreros. La propia montaña es en sí una joya geológica ya que la calidad de su piedra es única, la traquita que la hace tan característica es de un color gris-marrón claro con un veteado peculiar.


Montaña de Tindaya. La montaña sagrada de los maxos o majos, aborígenes prehispánicos,
raíz del gentilicio majorero. Foto bajada de internet.


Además de su importancia arqueológica, tiene un interés histórico innegable por la gran cantidad de grabados rupestres que alberga. Era su montaña sagrada y grabaron en ella cerca de 300 grabados de pie o podomorfos. Estos grabados solo están presentes en Canarias en Lanzarote y Fuerteventura y en zonas de influencia bereber del norte de África, no se conoce su significado, pero se sabe que los podomorfos de Tindaya apuntan al Teide en Tenerife y a la isla de Gran Canaria. En días despejados se aprecia desde su cima a 401 metros de altura, el Teide. En cambio los podomorfos de Lanzarote apuntan hacía la montaña de Tindaya. La montaña es Monumento Natural y Bien de Interés Cultural.

Dejamos atrás la FV-10 y cogemos la más comarcal FV-207 pero por la que se rueda genial. Pasamos Tefia y en Llanos de la Concepción no podemos evitar sacarnos una foto ante una estampa que podría representar perfectamente la Fuerteventura interior.


Estampa del interior de Fuerteventura. En este lugar podemos hacernos una idea de como era
la vida hace 100, 200, 300 años...,paisaje duro y agreste que hacía del día a día
una lucha constante contra los elementos. Llanos de la Concepción. Fuerteventura.
Islas Canarias. Foto del autor.


Desde aquí la carretera empieza a elevarse y entramos en el Parque Rural de Betancuria. Nos encaminamos hacía hacía el mirador de Morro Velosa. El mirador se halla en una elegante casona con porche de madera y techo de tejas rojas, un coqueto jardín nos da la bienvenida cuando dejamos el coche en el aparcamiento.


Entramos al mirador de Morro Velosa. Parque de Betancuria. Fuerteventura. Islas Canarias.
Foto del autor.


Desde este punto tenemos a nuestros pies la mayor parte del centro de la isla. Un paisaje
sobrio, una paleta de ocres y marrones que recuerda los paisajes de oriente próximo.
Un lugar espectacular. Mirador de Morro Velosa. Fuerteventura. Islas Canarias.
Foto del autor.


Estamos a 670 metros y desde aquí contemplamos la historia geológica de la isla, en la casa una exposición nos explica dicha historia y podemos contemplar una excelente maqueta de Fuerteventura. Además podemos tomarnos algo en su pequeño bar. El edificio del mirador es obra del artista canario César Manrique. 



- BETANCURIA.

Entre los montes y barrancos del Parque Rural de Betancuria llegamos a la capital histórica de la isla. Ya desde el coche empezamos a vislumbrar parte de la belleza de la pequeña localidad majorera. Tras aparcar en el parking gratuito que se encuentra a las afueras del pueblo, nos encontramos con la primera sorpresa. Un camino peatonal hecho de madera que nos lleva hasta el mismísimo casco histórico, una maravilla.


El camino de madera que nos lleva desde el aparcamiento al corazón de la capital
histórica de Fuerteventura. Betancuria. Islas Canarias. Foto del autor.
Fachada del ayuntamiento
de Betancuria. Fuerteventura.
Islas Canarias. Foto del autor.
El restaurante más antiguo de
Canarias y quizás de toda
Europa, 1404. Betancuria.
Fuerteventura. Islas Canarias.
Foto del autor.






















Como hemos dicho al principio, su nombre le viene de su fundador, el normando al servicio de la Corona de Castilla, Juan de Bethencourt. Juan junto a Gadifer de la Salle comenzaron la construcción de este asentamiento en 1404. Desde este año sería la capital de la isla y sede de sus diferentes órganos gubernativos, religiosos y administrativos.
En 1416 se construyó el Covento Franciscano de San Buenaventura, hoy en ruinas. Fue el primer convento de las islas Canarias, siendo San Buenaventura, el patrono histórico de la isla de Fuerteventura y de Betancuria.
Durante 7 años (de 1424 a 1431) la Iglesia de Santa María de Betancuria fue declarada Catedral.
A partir del S. XIX, Betancuria fue perdiendo progresivamente poder a favor de otros núcleos de población (gracias a su desarrollo económico), como La Oliva, Pájara, Puerto Cabras (Puerto del Rosario) o Antigua. Finalmente, en 1834 perdería la capitalidad de la isla.


Subiendo por la calle Concepción, a la izq. la casa Santa María con su fachada
inmaculada, detrás de ella nos encontraremos con la iglesia de Santa María de
Betancuria. Fuerteventura. Islas Canarias. Foto del autor.


Habíamos aparcado nuestro pequeño utilitario italiano en el parking gratuito que hay casi al final del pueblo y nos encaminábamos por un sendero precioso hacía el corazón del pueblo. Lo primero que nos llamó la atención es la exhuberancia floral que nos sale a saludar en la calle de la Concepción, pasamos por debajo de una maravilla de buganvilla que decora la fachada de la casa Santa María.


Bajo el balcón de la Casa Santa María en Betancuria.
Fuerteventura. Islas Canarias.
Foto del autor.


Y detrás de la casa Santa María, nuestra vista se abre a uno de los espacios más encantadores que he podido contemplar. La plaza de Santa María de Betancuria no ha perdido ni un solo ápice de belleza desde que la terminaron, allá por el S. XV. Es una maravilla anclada en los siglos, por ella si que no pasa el tiempo. Si quitáramos los turistas, los paneles informativos, alguna antena y los modernos faroles...nos sentiríamos como esos primeros castellanos que se asentaron en este rincón de las islas canarias.


Plaza de Santa María de Betancuria. Un lugar encantador en el que el tiempo se ha detenido.
Fuerteventura. Islas Canarias. Foto del autor.

El autor en la plaza de la iglesia de Betencuria. Fuerteventura. Islas Canarias.
Foto de Araceli Hidalgo.
La plaza de la iglesia de Santa María de Betancuria, el templo empezó a construirse en 1410.
Fuerteventura. Islas Canarias. Foto del autor.
Fuente junto a la plaza de la iglesia de Santa María de Betancuria. Fuerteventura.
Islas Canarias. Foto del autor.
Plaza de la iglesia de Santa María de Betancuria. Fuerteventura. Islas Canarias.
Foto del autor.






Foto desde el puente que cruza el barranco de Betancuria, detrás de la exhuberancia vegetal
se encuentra la plaza de la iglesia de Santa María. Fuerteventura. Islas Canarias.
Foto del autor.



Dejamos atrás la antigua y medieval capital histórica de Betancuria y nos ponemos de nuevo en ruta por la carretera de montaña del Parque Rural de Betancuria. Es un paisaje que recuerda mucho a aquellos que hemos visto en reportajes o películas rodadas en Oriente Medio, Palestina o los alrededores de Jerusalén. En varios puntos del recorrido tenemos miradores para disfrutar de las vistas sobre el valle y de unos animales muy simpáticos, las ardillas.


Ardilla en el Mirador de las Peñitas en pleno Parque Rural de Betancuria. Fuerteventura.
Islas Canarias. Foto del autor.




- PÁJARA, CASTILLO CALETA DE FUSTE Y PUERTO DEL ROSARIO.


Llegamos a Pájara, en esta zona del llano en medio de la isla de Fuerteventura. A comienzo del S. XVI se establecieron en este lugar tanto pescadores como ganaderos. Su historia nos cuenta que ya en 1687 existía la hermosa iglesia de Nuestra Señora de Regla,  icono de esta pequeña población majorera. La iglesia de estilo Clásico es de dos cuerpos y su fachada destaca por sus tallados decorativos de inspiración azteca, con soles, leones y serpientes. No existen antecedentes sobre su posible origen.


Fachada de la iglesia de Pájara. Fuerteventura. Islas Canarias. Foto del autor.


Curiosas las piedras talladas en la fachada de la iglesia, se aprecian soles, leones,
serpientes y en los laterales lo que parecen tocados de plumas, típicos de la nobleza
azteca. El cantero que decoró la iglesia podría haber pasado parte de su vida al
otro lado del Atlántico y trajo su inspiración a Fuerteventura. Pájara. Islas Canarias.
Foto del autor.


Pájara es además el municipio más extenso de la isla, abarcando todo el sur de la misma.
En 1729 se estableció la milicia, dirigida por los Coroneles desde La Oliva para proteger este territorio de los ataques de los piratas ingleses que asolaban en esa época las dos islas mas orientales del archipiélago.
Desde 1812 es un ayuntamiento independiente, reúne los poblados de La Lajita, El Puertito, Toto, La Lajita, Matas Blancas, Chilegua, El Cardón, Puerto de la Peña y Morro Jable.


Molino en un pozo de agua en Pájara. Fuerteventura. Islas Canarias. Foto del autor.



El municipio de Pájara es el de mayor litoral de España, cuenta con 150 kilómetros de costa de los cuáles, 70 son de playas de arena blanca y mar de color turquesa, las más conocidas y bellas son las de Jandía.

Salimos de Pájara y subiendo hacia el norte por la FV-20 pasamos por Tuineje, Tiscamanita, Agua de Bueyes y Antigua, giramos hacía el este y nos encontramos de nuevo en la costa. Caleta de Fuste es un municipio muy turístico en la costa este de Fuerteventura, es conocida por sus campos de golf y por su playa resguardada. En la propia playa nos encontramos con una torre defensiva del S. XVIII. El castillo de San Buenaventura fue erigido principalmente para la defensa de esta zona de la isla contra piratas ingleses, franceses y berberiscos. 
Una cosa que nos llamó la atención y nos indignó, es como utiliza un hotel privado la torre que es patrimonio de todos los españoles, como si de una decoración de cartón-piedra más se tratara. El complejo turístico rodea casi por completo el monumento, dejando tan solo para su visita el acceso desde la playa. Estoy seguro que hubo alguien en el ayuntamiento que tuvo que darse cuenta de este atropello...y no hizo nada siendo este castillo de San Buenaventura Bien de Interés Cultural.
La torre de defensa de Caleta de Fuste sitiada por los descendientes de los piratas ingleses en pleno
2018. Ahora, tumbados en sus hamacas y bebiendo desde el bar-piscina intentan tomar las
defensas de la isla que sus antepasados jamás pudieron. Fuerteventura. Islas Canarias.
Foto del autor.
De hecho, nosotros tuvimos que atravesar el hotel de parte a parte para poder acceder al mini-paseo marítimo que nos llevaba a la torre. Para los menos aventureros, recomiendo acceder desde el paseo de la propia playa de Caleta. La torre es de planta circular y tiene dos alturas, con una bóveda sostenida por un grueso pilar en el centro. Su armamento constaba de dos cañones de hierro de pequeño calibre y contaba con dotación militar. En lo alto de la torre hay una garita, un común (aliviadero para la tropa) y un aljibe para almacenar agua.


La torre es una maravilla hecha con la elegante piedra negra volcánica que tanto abunda
en la isla. El autor está sobre el pequeño puente levadizo que da acceso a la
fortaleza. Llama la atención lo pequeña que es la puerta de acceso, para dificultar la
entrada de enemigos en tropel al castillo, así como la barbacana justo sobre ella para
disparar mosquetazos a la cabeza de los que intenten atravesarla. Caleta de Fuste.
Islas Canarias. Foto de Araceli Hidalgo.


 Al norte, el Dream House Museum ofrece una exposición de maquetas de trenes y juguetes antiguos. Al sur se encuentra las salinas del Carmen, con un museo de la sal y el esqueleto de una ballena.

Ya va cayendo la tarde y nos dirigimos hacía el norte, hacía la antigua Puerto de Cabras, capital de la isla de Fuerteventura desde 1860, cuando sustituyó a la medieval Betancuria. Según varios autores el caserío inicial de Puerto de Cabras se estableció a finales de S. XVII y se desarrolló en paralelo al crecimiento del tráfico marítimo de su puerto, declarado habilitado para la exportación en 1713. El 16 de marzo de 1956 pasa a denominarse Puerto del Rosario. 


Paseo marítimo de Puerto del Rosario. Fuerteventura. Islas Canarias.


La población de la capital de Fuerteventura es de 38.711 habitantes, entre sus playas destacan la de Puerto Lajas, Playa de los Pozos y Playa Blanca, que ofrecen las condiciones necesarias para la practica de deportes como el surf y el windsurf.

La isla es un oasis de paz y tranquilidad, ideal para desconectar de cualquier ritmo de vida, sobre todo la de esos currantes urbanitas que tienen en el reloj y en el móvil su religión diaria. En Fuerteventura el tiempo corre más lento, las playas son kilométricas y el espacio lo marcas tú mismo. Aquí, la tranquilidad es un ente casi físico que puedes tocar y disfrutar. No vengáis a la isla si buscáis muchos sitios que ver, planes organizados y visitas guiadas a monumentos o grandes ciudades. A Fuerteventura se viene a recuperar el relax perdido en el día a día, a cargar pilas tumbados en una toalla en la playa o en la piscina del hotel y a pasear por sus dunas cuando empieza a atardecer.
Si no existiera Fuerteventura, habría que inventarla.

Tras este pequeño paréntesis canario, proseguiremos en el próximo post con la Escapada a Asia-2016. Bali nos espera.






Próximo post: Bali (I). Kuta la playa más turística del mundo.