viernes, 17 de mayo de 2024

23.3 - LONDRES (III). IMPERIAL WAR MUSEUM Y PALACIO DE BUCKINGHAM.

 5 de mayo de 2024. Domingo.

Las Palmas de Gran Canaria.


Tercer día de "Escapada" por Londres. En esta ocasión vamos a empezar por un tipo de museo que no suelo perderme cuando visito una ciudad; los museos militares.

Estando en Londres vamos a conocer uno de los de mayor solera del Reino Unido, el Imperial War Museum. Como casi todos los museos de Londres, es gratuito.
Se halla en el edificio que albergó el hospital psiquiátrico de Bethlehem construido en 1811 y que quedó vacío en 1930. Tras derribar las alas laterales del edificio, el Imperial War Museum se trasladó al edificio central, único que quedaba en pie, en 1936.

Edificio del Imperial War Museum con sus famosos cañones navales en la entrada.
Londres. Foto del autor.

Sala de entrada del Imperial War Museum. Londres. Foto del autor.


Según el tríptico que nos dan a la entrada, el museo que visitamos es el más importante del mundo en torno a "la guerra y el conflicto"; en eso discrepo, y debo reconocer que el Caen Memorial Museum en la ciudad francesa de Caen (Normandía) dedicado a la IIª G.M. me gustó más. También porque el espacio museístico en el caso francés es más grande y los dioramas a tamaño real con vehículos y maniquís de época son impresionantes. Pero sigamos con el Imperial War Museum; el museo se fundó en plena Iª G.M. (1917) y da voz a los millones de personas que sufrieron en sus vidas el terror de este primer gran conflicto del S. XX y del que le siguió.

El autor delante de un tanque soviético T-34 de la IIª G.M. Imperial War Museum.


El museo examina la influencia de la guerra en el S. XX y lo hace a través de un atrio de entrada espectacular y cinco pisos. En dicho "hall" de entrada veremos colgados del techo un avión Harrier (aún en servicio, entre otros ejércitos en el español), un Supermarine Spitfire de la IIª G.M, un misil V-2 alemán de la IIª G.M y varios vehículos terrestres y aéreos más.

Sala de entrada del Imperial War Museum. Se aprecia el avión Harrier, el Spitfire de la IIª GM
y el misil V-2 alemán con el que Hitler bombardeaba Inglaterra en ese conflicto. Londres.
Foto del autor.



Impresiona tener tan cerca un avión Harrier. Vista desde uno de los pisos superiores del
museo. Londres. Foto del autor.


Además de este aperitivo, el museo muestra los efectos sociales de las guerras del S. XX  y su impacto en la vida de la gente: racionamiento de comida, ataques aéreos contra civiles, la censura, métodos para elevar la moral de la sociedad, etc. Para ello cuenta con películas de guerra, programas de radio y literatura bélica, cientos de fotografías, pinturas de Paul Nash y esculturas de Jacob Epstein. Además de las escenas de Henry Moore evocadoras de los bombardeos de 1940 sobre Londres. Por último, el museo cuenta con piezas procedentes de las últimas operaciones de las fuerzas armadas británicas.

Tanque y aeroplano británico de la Iª G.M. El tanque es un Mark-IV y el avión un 
Sopwith Camel. Imperial War Museum. Londres. Foto del autor.

Uniforme alemán (el gris) y francés de la Iª G.M.
Imperial War Museum. Foto del autor.

Ametralladora Maxim M1910 utilizada por el Ejército Imperial Ruso en la Iª G.M. por el
Ejército Rojo en la IIª G.M y por el Ejército de Ucrania en la invasión de su país por
parte de Rusia en la actualidad. Una máquina de muerte atemporal. Imperial War Museum.
Londres. Foto del autor.

Cañón británico de la Iª G.M. Imperial War Museum. Londres. Foto del autor.


Detrás del atrio, en el piso 0, encontraremos las galerías dedicadas a la Iª G.M enfocadas principalmente al ejército británico. 
En el primer piso hallaremos las salas dedicadas a la IIª G.M y una exhibición en la terraza llamada; "testigos de Guerra".

Bombardero británico de la IIª G.M. Imperial War Museum. Londres. Foto del autor.



Tanque Sherman norteamericano de la IIª G.M. Imperial War Museum.
Londres. Foto del autor.

 
Los restos de un caza japonés Zero de la IIª G.M en el Imperial War
Museum. Londres. Foto del autor.


Marine americano con 
lanzallamas con uniforme
para la campaña del Pacífico.
Imperial War Museum. Londres.
Foto del autor.
Uniforme alemán de la
IIª G.M. y un panzerfaust
y un fusil Mauser Kar-98.
Imperial War Museum.
Londres. Foto del autor.























En el segundo piso contemplaremos las salas dedicadas al Holocausto judío durante la IIª G.M. esta sala, como indica un cartel a su entrada no es recomendable para niños menores de 14 años por la dureza de sus fotografías y vídeos. 
En el tercer piso veremos galerías con películas y fotografías y la sala dedicada a exhibiciones temporales, nosotros vimos una dedicada a los espías y sus técnicas a lo largo del S. XX. En el cuarto piso encontraremos la terraza para eventos del museo y el quinto y último piso la sala llamada The Lord Ashcroft Gallery, dedicada los héroes británicos y de sus colonias que destacaron en los dos conflictos mundiales. Ojalá este museo nos ayude a reflexionar y a no cometer los mismos errores del pasado. Y como siempre digo: "no hay nadie que odie más la guerra, que el soldado."

Tras salir del museo nos vamos a comer a una zona muy animada de Londres, Liverpool Street.


- LIVERPOOL STREET.

La zona de Liverpool Street tiene un edificio muy singular e importante, una de las principales estaciones de la ciudad, situada en la zona de la City. La London Liverpool Street Station fue abierta en 1874 y desde ella salen los trenes con destinos al este de Inglaterra y al aeropuerto de Stansted. También cuenta con estación de Metro.

Paseando por Bishopsgate en Liverpool Street. Londres.
Foto del autor.

Contraste de edificios en Liverpool Street.
Londres. Foto del autor.


En esta animada zona de Londres encontraremos un montón de locales de restauración, pubs, cafeterías, pastelerías y tiendas de toda clase. Además en la calle trasera a la estación tenemos el centro comercial Broadgate Circle. Nosotros optamos primero por tomarnos una Guinness en el pub Hamilton Hall junto a la salida de la estación de Liverpool Street y después comemos en un food-truck muy cerquita del mercado de Spitalfields que se encuentra a pocos minutos andando de la estación de Liverpool.

Tomando una Guinness en el pub Hamilton Hall en Liverpool Street.
Londres.


Descansando un rato frente a la iglesia de San Botolph en la zona de Liverpool Street.
Londres. Foto del autor.


Tras dar una vuelta por Liverpool Street nos encaminamos a otra de las atracciones turísticas que no podemos perdernos en Londres, el palacio de Buckingham.


- EL PALACION DE BUCKINGHAM.

Llegamos en Metro a la estación de St. James Park, desde aquí caminamos unos 200 metros y entramos en St. James Park por la entrada donde se encuentra la Drinking Fountain. 
Este parque británico, situado frente al palacio de Buckingham, tiene 23 hectáreas y es el más antiguo de los Parques Reales. St James está rodeado por el palacio de Buckingham al oeste, The Mall y palacio de St. James al norte, Horse Guards al este y Bridcage Walk al sur.

Vista hacia el este desde el puente sobre el lago del parque St. James. Se aprecia al fondo
la noria London Eye. Londres. Foto del autor.


El parque tiene un pequeño lago, el Sant James-Park´s Lake, con dos islas, Duck Island (debido a los patos que habitan el lago) y West Island.
Un puente que cruza el lago ofrece una maravillosa vista al oeste del Palacio de Buckingham enmarcado por árboles y fuentes, y una estupenda vista del edificio principal de la Foreign and Commonwealth Office, al este.

Vista del palacio de Buckingham desde el puente
que cruza el lago de St. James Park. Londres.
Foto del autor.



El parque se creó en 1532 por Enrique VIII cuando compró está zona que era una marisma pantanosa. Este terreno lindaba al oeste con el palacio de York, que también compró el rey para convertirla en una residencia real. En 1603, al ascender al trono el rey Jacobo I, ordenó que se drenara el parque y se ajardinara, para guardar en él animales exóticos, entre los que había camellos, cocodrilos y un elefante, así como aviarios con aves exóticas.

Buckingham House en 1810. Londres. Foto de internet.


Las posteriores remodelaciones efectuadas entre 1826 y 1827, vieron como el canal se transformaba en lago. Al mismo tiempo Buckingham House se amplió para crear el actual palacio y se construyó el Marble Arch como entrada, mientras que The Mall pasó a convertirse en la gran avenida procesional, abierta al público 60 años más tarde, en 1887 y que hoy solemos ver por la tele engalanada de banderas de la Unión Jack en cada ceremonia que tiene como protagonista a la familia real británica. 

The Mall, la calle que lleva de Trafalgar Square al Palacio de Buckingham pasando por el Arco
del Almirantazgo (al fondo en la fotografía). Nació en el S. XVII como un elegante paseo
bordeado de árboles. Londres. Foto de internet.



Paseamos por St. James Park intentando grabar a las rápidas ardillas que esquivan a los perros de los paseantes subiéndose a los árboles y comiendo las cosas que les tiran los turistas.
Poco a poco nos acercamos al Victoria Memorial, el monumento que se encuentra en la rotonda frente al Palacio de Buckingham. Como indica su nombre, el monumento está dedicado a la Reina Victoria y fue inaugurado en 1911.

Ardilla en los jardines de St. James Park. Londres. Foto del autor. 

Monumento a la Reina Victoria frente al palacio de Buckingham. Londres. Foto del autor.


El autor frente al Victoria Memorial. Londres.


Y ya estamos frente a las puertas enrejadas del palacio de Buckingham que es la residencia oficial del monarca en la capital británica. También se utiliza para ceremonias oficiales, visitas de Estado y visitas turísticas. Es famoso además por albergar una parte sustancial de la Royal Collection, extraordinario conjunto de obras artísticas fruto del coleccionismo real.  
El Palacio y la explanada frente a él se ha convertido en punto de reunión de los británicos en tiempos de calamidad, de crisis o de festividad.

Verja de entrada al Palacio de Buckingham. Londres. Foto del autor.



El palacio fue conocido originalmente como Buckingham House y era la residencia de recreo del primer duque de Buckingham en 1703. En 1762 fue adquirido por el rey Jorge III para convertirlo en residencia pública. En los siguientes 75 años sufrió una serie de ampliaciones creándose tres alas con un patio central abierto. Con la llegada al trono de la Reina Victoria (1837), el Palacio de Buckingham pasó a ser la residencia oficial de la monarquía. Durante los siglos XIX y XX, se hicieron algunas reformas en el palacio, como la que se llevó a cabo en 1913 y que dio la palacio su fachada principal actual, incluido el balcón desde donde saluda la familia real.

Fachada principal del palacio de Buckingham donde se encuentra el balcón al que sale
la familia real a saludar. La Guardia Real monta guardia 24 horas al día, en esta ocasión con
uniforme ordinario. Londres. Foto del autor.


En la actualidad el rey Carlos III ha preferido mantener su residencia oficial en Clarence House, que se encuentra en The Mall a escasa distancia de Buckingham.

 
Palacio de Buckingham. Londres.


Nos despedimos de Buckingham Palace. Londres. Foto del autor.



Tras visitar Buckingham regresamos a la estación de Metro de St. James Park para regresar a nuestro apartamento. Mañana nos queda el último día por Londres con un plato fuerte, el British Museum. 


Vista de la City de Londres desde el décimo piso de nuestro apartamento.
Londres. Foto del autor.




- PRÓXIMO POST: 23.4- LONDRES (Y IV). MUSEO BRITÁNICO Y RINCONES DE LONDRES.

No hay comentarios:

Publicar un comentario