domingo, 6 de noviembre de 2022

21.3- GRANADA (I). UNA CIUDAD POR DESCUBRIR.

 18 de octubre de 2022. Jueves.

Las Palmas de Gran Canaria.


Tras recorrer en los dos artículos anteriores el mayor monumento medieval que existe en España; la Alhambra, vamos ahora a conocer, en otros dos artículos, la ciudad que lo alberga, Granada.

 En la capital andaluza viven más de 230.000 personas y es un referente en turismo gracias a su monumento más conocido y a la cercanía de la estación de esquí de Sierra Nevada. Otro de los lugares más conocidos de la provincia son los pueblos blancos de las Alpujarras y a unos pocos kilómetros por autovía (60 kilómetros) la costa mediterránea conocida como Costa Tropical con pueblos tan bonitos como Salobreña o Almuñécar.

Dentro de la capital no podemos perdernos la ruta de pinchos por el centro de la ciudad, el barrio del Albaicín con sus espectaculares miradores o el Sacromonte con sus "tablaos" flamencos en cuevas. Otro imprescindible es la catedral y anexa a ella su espectacular Capilla Real donde encontraremos las tumbas de los Reyes Católicos, para mí uno de los monumentos históricos más importantes del mundo. Es una pena que no se promocione y conozca mucho más. Cualquier país se enorgullecería de haber tenido a los reyes que más han influido, para bien, en la historia de la humanidad.

Además conoceremos la calle Calderería Nueva donde nos sentiremos como en un barrio de cualquier ciudad musulmana (turística, claro), el Paseo de los Tristes junto al río Darro con vistas a las impresionantes murallas de la Alhambra o la Alcaicería, el antiguo gran bazar de la Granada nazarí. 

Todos estos lugares los visitaremos en nuestros dos artículos pero además, si tenéis tiempo, podéis disfrutar del Parque de las Ciencias, el museo de Bellas Artes, el Archivo Manuel de Falla o el Centro Federico García Lorca.

Torre de Comares. La Alhambra. Foto del autor.

Y aunque siempre solemos comenzar con "un poco de historia", en este caso os voy a remitir al primer artículo de la serie sobre Granada: "21.0- Granada, un poco de historia antes de una escapada." que subí al blog el 14 de julio de 2022.


- GRANADA. NOS PERDEMOS POR EL CENTRO. DE LA ALCAICERÍA AL RÍO GENIL Y REGRESO A LA PLAZA DE LA ROMANILLA.


La mañana empieza saliendo de nuestro alojamiento en plena Gran Vía, el hostal Room Los Montes en la calle Cedrán 5.

La entrada al hostal con un inconfundible aire nazarí.
Granada. Foto del autor.


Nos vamos a desayunar por los locales de tapas que encontramos en la calle Cetti Meriem, la calle Joaquín Costa o la calle Elvira que se encuentran en las paralelas de la Gran Vía.

De tapas por Granada.
Foto del autor.
De tapas por Granada.
Foto del autor.













El primer sitio que vamos a visitar es la Alcaicería. La Alcaicería era el antiguo Gran Bazar de Granada, se extendía desde lo que es hoy la Plaza Nueva hasta la antigua Puerta de Bib-Rambla, hoy Plaza de Bib-Rambla. En el medievo tenía gran fama tanto en tierra de cristianos como en tierra de moros y de toda la península llegaban mercancías hasta aquí.

Una de las entradas a la Alcaicería. La de la calle Zacatín.
Granada. Foto del autor.

El origen del nombre es árabe pero estos lo adaptaron del latín cuando el emperador Justiniano (482-565 d.C.) cedió a los árabes el derecho a comerciar con la seda. En agradecimiento, estos llamaron a los mercados "al-Kaysar-ia", o sea, "el lugar de César". 

El Gran Bazar de Granada sobrevivió hasta el 20 de julio de 1843, cuando un gran incendio lo destruyó. Una réplica en estilo neo-morisco, entonces en boga lo sustituyó, ocupando una porción de terreno mucho más pequeño al original.

La Alcaicería fue el gran bazar del lujo de la Granada nazarí. Albergaba más de doscientas tiendas formando un laberinto de callejuelas a las que se accedía por diez puertas. Estas puertas se bloqueaban con cadenas de hierro para evitar el paso de caballos y eran custodiadas por guardias para velar por las riquezas que albergaba uno de los bazares más importantes de la península y de media Europa.

Alcaicería. Granada.
Foto del autor.
Alcaicería. Granada.
Foto del autor.















La Alcaicería de hoy esta repleta de tiendas con recuerdos turísticos, donde se vende toda clase de artesanía granadina: su cerámica pintada (fajalauza), la incrustación de madera (taracea) y los faroles de cristal coloreado. Además de gran variedad de regalos y productos gastronómicos.

Y desde la Alcaicería, simplemente cruzando la avenida de los Reyes Católicos, nos vamos a ver el Corral del Carbón. Este lugar fue una alhóndiga fundada en la primera mitad del S. XIV por Muhammad V y que servía de almacén y punto de venta de trigo al por mayor, a la vez que lugar de alojamiento para los mercaderes que lo traían hasta Granada. Tras la Reconquista, en 1531, el edificio se vendió y pasó a ser corral de comedias.

En el S. XVII se convirtió en corral de vecinos, usándose las habitaciones de la planta baja como almacén para el carbón, de donde le vino el nombre actual. En 1887 fue declarado Monumento Nacional, por entonces en el Corral del Carbón habitaban 36 familias. El edificio se rehabilitó entre 1929 y 1931.

El arco de entrada al Corral del Carbón con los preciosos
mocárabes que lo adornan. Granada. Foto del autor.

Se entra por una única puerta donde destaca el arco de herradura que da directamente al zaguán de los dos primeros pisos cubierto por una bóveda de mocárabes. El interior de la alhóndiga es un patio cuadrado con pilar en el centro rodeado de tres pisos. El bajo se utilizaba para la mercancía y los animales de carga y los dos altos con 22 pequeñas habitaciones con candil pero sin camas, solo con grandes esteras, eran las alcobas donde dormían envueltos en sus grandes capas los mercaderes.

Del pilar central del patio manaba, por dos caños diferentes, agua del río Darro que llegaba por la acequia de Romayla y agua del río Genil que llegaba a través de un ramal urbano de la llamada acequia Gorda.

El patio del Corral del Carbón con su pilar de dos caños de donde mana el agua.
Se aprecia perfectamente el piso inferior para mercancías y caballerizas y los
dos superiores donde se alojaban los mercaderes. Está prácticamente igual
a como estaba hace casi seis siglos. Granada. Foto del autor.


Los pisos se apoyan sobre pilares de piedra en el piso bajo y de ladrillo en los altos. No había una sola ventana en el edificio para evitar que se pudiera robar la mercancía y a su cargo estaba el alhondiguero que vivía en las habitaciones sitas sobre la puerta, controlando la entrada y salida de mercancías. Esta única puerta se cerraba al anochecer, sin que los mercaderes pudieran salir hasta la salida del sol. Poco antes del amanecer se les avisaba para que pudieran reunir sus bagajes y animales, abriendo después las puertas, así se evitaba que alguien se llevara aquello que no era suyo. 


Al salir del Corral del Carbón vamos a pasear hasta el río Genil para disfrutar de los Jardines del Salón. Para ello bajaremos por la avenida de los Reyes Católicos hasta la plaza llamada Puerta Real. Por esta plaza pasaba la muralla y aquí se encontraba la antigua puerta nazarí de Bib-al-Rambla. Tras la Reconquista fue renombrada como Puerta del Rastro o de la Paja para, a partir del 8 de abril de 1624 a causa de la visita del rey Felipe IV, pasar a llamarse definitivamente Puerta Real. 

Plaza de la Puerta Real. Granada. Foto del autor.


Desde la plaza de la Puerta Real bajamos por la calle Acera del Darro que es el cauce del río Darro que baja bordeando la Alhambra pero desde que entra en la Plaza de Santa Ana esta soterrado bajo la avenida de los Reyes Católicos. Esta calle por la que caminamos termina cuando el río subterráneo desagua en el río Genil junto al puente romano y a los Jardines del Salón. Hacia allí nos dirigimos.

Por el camino pasamos junto a la Fuente de Las Batallas. Es una fuente monumental de estilo barroco que por la noche está especialmente bella gracias a su iluminación. No se tienen datos claros sobre su origen aunque se apunta que pertenecería al convento de Belén y se la conocía como Fuente de la Reina.

Fuente de Las Batallas en la plaza homónima. Granada. Foto del autor.

El nombre de "las batallas" de esta plaza viene de siglos atrás. Este espacio junto con el Campillo, ya en la edad media, eran zonas de extramuros de la ciudad de Granada y era el lugar donde se reunían las unidades del ejército para pasar revista. A las unidades militares se las conocía como "batallas" y de ahí su nombre.

Tras pasar por la plaza de Las Batallas seguimos bajando por la preciosa avenida Carrera de la Virgen que termina en los jardines del Salón.

En estos jardines podemos descansar mientras disfrutamos de la fuente de Las Granadas, frente a la biblioteca pública. Es uno de los lugares más fotografiados de la ciudad moderna. Fue inaugurada el 31 de marzo de 2007. La fuente está hecha íntegramente en bronce y sus principales motivos escultóricos son cuatro, que representan los principales accidentes geográficos de Granada.

Fuente de Las Granadas en el jardín del Salón. Granada.
Foto del autor.

 
Fuente de las Granadas. Jardines del Salón. Granada. Foto del autor.

Cada uno de ellos mira hacia el lugar que representa: Sierra Nevada, una mujer que lleva una flor de las nieves del pelo. La Vega, otra mujer con una espiga de trigo. El río Darro, un hombre con un plato de batear oro y el río Genil. Otro de sus motivos escultóricos es un grupo de granadas y el último, en lo alto, una mujer semidesnuda portando una granada en la mano y mirando hacia la Fuente de las Batallas. Como curiosidad contar que la Fuente de las Granadas y la de las Batallas están alineadas y desde la Carrera de la Virgen se puede ver como el chorro superior parece tocar el pico del Veleta.  

Desde los jardines también podemos ver el Puente Romano que cruza el río Genil en la confluencia con el río Darro. Este puente es de época zirí (finales del S. XI y principios del XII). Constituyó durante siglos el único paso firme que permitía el tránsito de personas entre la ciudad de Granada y su vega para enlazar luego con el camino a las Alpujarras y a la costa granadina.

Puente Romano visto desde los jardines del Salón. Granada. Foto del autor.


El puente, tal y como lo conocemos hoy, se debe a la reconstrucción iniciada en el S. XVII. El puente romano, que no es romano como hemos contado aquí y se canta en una coplilla popular granadina, fue restaurado varias veces en su dilatada historia e incluso estuvo a punto de desaparecer en las crecidas de 1963. 

Y tras bajar hasta el río subimos de vuelta a la Puerta Real para conocer y recorrer algunas de las calles peatonales más comerciales de Granada. Subimos por la calle Mesones donde disfrutamos de una gran cantidad de establecimientos comerciales de todo tipo.

Calle Mesones. Granada. Foto del autor.

Y desde la calle Mesones llegamos a la encantadora Plaza de La Trinidad con su fuente. En esta plaza confluyen las principales calles comerciales de la capital: Mesones, Alhóndiga y Pescadería. Es un lugar encantador donde disfrutar de un rato de descanso a la sombra de sus árboles frutales y boneteros de Japón.

Plaza de la Trinidad. Granada. Foto del autor.

Esta plaza se remonta a época musulmana cuando se encontraba al lado de la puerta de Bab-al-Mazda junto a la muralla zirí que había en el S. XI. En aquel siglo la plaza era un simple espacio abierto entre varios muros que lo rodeaban. 

El nombre de la plaza se debe a su origen católico, ya que fue bajo el reinado de Carlos V cuando se mandó cristianizar la plaza que tenía origen árabe.

Plaza de La Romanilla. Presidiendo el lugar la espectacular Torre Campanario de la catedral
de Granada, terminada en 1589. Granada. Foto del autor.


Desde aquí continuamos hasta uno de los rincones con más encanto de la capital granadina, la Plaza de la Romanilla. A esta plaza se la conoce también como plaza de Las Palmeras, se encuentra muy cerca de la catedral y en época árabe aquí se encontraba uno de los zocos de la ciudad. En 1973 se derribo el último mercado que había aquí llamado de la "Romanilla" por la caseta oficial de "repeso". En esta caseta se podía comprobar con una pequeña pesa romana llamada la "romanilla" la exactitud en el peso de los artículos comprados.

Plaza de La Romanilla o de Las Palmeras, un lugar encantador para tomar algo. Lo de comer,
ya es otra cosa, restaurantes muy para turistas. Granada. Foto del autor.

Plaza de La Romanilla también llamada de Las Palmeras, por motivos obvios.
Granada. Foto del autor.


Desde la Plaza de la Romanilla nos vamos a tomar un té con pastelitos a la calle con más teterias de Granada, la calle Calderería Nueva.

Teteria en la calle Calderería
Nueva. Granada. Foto del autor.


Teteria en la calle Calderería Nueva.
Granada. Foto del autor.












Tras el té nos vamos a comer a uno de los locales de restauración más conocidos de Granada "Los Manueles".

Huevos con habitas tiernas y jamón.
Granada. Foto del autor.
Huevos estrellados con jamón.
Granada. Foto del autor.














Pimientos del piquillo rellenos. Granada. Foto del autor.



- BARRIO DEL ALBAICÍN Y PASEO DE LOS TRISTES.

Tras comer como sultanes nazaríes salimos a andar un poco y hacer la digestión, y nada mejor para ello que subir al Albaicín para disfrutar de una de las vistas más espectaculares del mundo.

Para iniciar este paseo, uno de los más icónicos y encantadores de la ciudad vamos a ubicarnos en la Plaza Nueva y la Plaza de Santa Ana. 

Pero antes no podemos dejar de saludar y admirar a la que, en mi humilde opinión, ha sido la reina más importante de la Historia de España y probablemente de la historia de la Humanidad, Isabel I de Castilla, Isabel la Católica. De no ser por su mente abierta Colón seguramente no hubiera podido encontrar apoyos para su viaje hacía el "gran mar occidental". Nos encontramos en la Plaza Isabel La Católica. La obra, representa las "Capitulaciones de Santa Fe" cuando Colón convenció a la reina para que financiase su viaje a las Indias. Fue ubicada inicialmente en los Jardines del Salón (descritos anteriormente) en 1892 coincidiendo con el Día de la Hispanidad, 12 de octubre, de ese año.



Plaza Isabel La Católica.
Granada.




En los años 60 del siglo pasado fue reubicada en su actual ubicación y aquí, muy cerquita de la Plaza de Santa Ana es donde la admiramos ahora.

Plaza Isabel La Católica. Granada.
Foto del autor.
 La Plaza Nueva y la Plaza de Santa Ana son las más céntricas y concurridas de Granada debido a su estratégico enclave histórico y turístico, al estar en medio de la calle Gran Vía, la calle Reyes Católicos, la antiquísima calle Elvira y la más famosa de todas la Carrera del Darro.

Edificio de la Real Chancillería en la Plaza de Santa Ana. Granada. Foto del autor.

Iglesia de San Gil y Santa Ana. Plaza de Santa Ana. Granada.
Foto del autor.


Aquí nos encontramos con edificios tan importantes y bellos como la Real Chancillería, sede del Alto Tribunal de Justicia desde el año 1500 por orden de los Reyes Católicos. Actualmente es el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía, Ceuta y Melilla y la iglesia de San Gil y Santa Ana con su preciosa torre mudéjar.

La iglesia de San Gil se levantó en 1501 sobre la aljama (mezquita) Almazora y es sin duda, una de las más bellas de la ciudad.

Desde aquí también se llega a la Cuesta de Gomérez, atravesando la preciosa Puerta de Las Granadas, para subir a través del Bosque a La Alhambra.

Tras pasar al lado de la iglesia de San Gil y Santa Ana ya observamos el río Darro y comenzamos a subir por la calle homónima, la Carrera del Darro también llamado Paseo de Los Tristes.

Puerta de Las Granadas. Se levantó en 1536 para conmemorar la visita
del emperador Carlos V. En el dintel presenta el escudo imperial.
Granada. Foto del autor.


Aunque está oculto bajo los árboles que crecen en sus orillas, el río Darro
corre junto a la iglesia de San Gil y Santa Ana. Carrera del Darro. Granada.
Foto del autor.


Subimos por esta mítica calle de Granada, la más bonita de la capital andaluza y la que menos ha cambiado con el paso de los siglos. Pasamos junto al río Darro por una calle semi-peatonal adoquinada mientas disfrutamos de varios puentes de ladrillo cantería; el Puente de Cabrera y el Puente de Espinosa ambos del S. XVII.

Llegando al Puente Cabrera en la Carrera del Darro.
Granada. Foto del autor.


A esta altura, si alzamos la vista hacia la colina de la Sabica contemplamos la majestuosa Alhambra. Desde el inicio de la Carrera del Darro podemos ver la Alcazaba con su Torre de la Vela y Torre del Cubo. Un poco más adelante, llegando ya al Paseo de Los Tristes, vemos la Torre de Comares, la más alta del monumento y símbolo de los Palacios Nazaríes.

Los puentes Cabrera y Espinosa comunican la calle del Darro con el barrio de la Churra. Estos puentes han llegado hasta nuestros días casi intactos desde el S. XVII. No hubo tanta suerte con los desaparecidos Puente del Cadí o Puerta de Los Tableros que ya desde el S. XI unía la Alhambra con el barrio del Albaicín.

Contemplamos los restos del arco de herradura donde estaba el puente del Cadí,
detrás se encontraría la torre hexagonal que enlazaba con las murallas de la
Alhambra. Granada. Foto del autor.

Los restos del arco que mantenía el antiguo puente del Cadí.
La puerta fortificada que unía el Albaicín con la Alhambra.
Granada. Foto del autor. 


A unos 200 metros del puente de Espinosa podemos ver los restos del arco de herradura donde estaba el Puente del Cadí, la Puerta de Los Tableros y la torre hexagonal que defendía este acceso a la Alhambra y enlazaba con el resto de la muralla.

Patio central del Museo Arqueológico
de Granada
. Foto del autor.
Entrada al Museo Arqueológico de
Granada
. La fachada renacentista
de la Casa del Castril fechada en
1539 es impresionante. Foto del autor. 














Un poco más adelante nos encontramos con la iglesia de San Pedro y San Pablo. En 1509 explotó un polvorín que había a su lado causando numerosos destrozos y derribando parte de la muralla. Esta iglesia es de la más antiguas de la ciudad, data de 1501 y se sitúa frente al Museo Arqueológico de Granada que se ubica en la Casa del Castril, un palacio renacentista cargado de historia que data de 1539. El museo abrió en 1923 y alberga objetos procedentes de yacimientos arqueológicos de toda la provincia. Es uno de los museos más antiguos de España y dentro de él, además de sus tesoros arqueológicos, no podéis perderos las mágicas vistas de la Alhambra desde su segundo piso.

Segunda planta del Museo Arqueológico de Granada. Carrera del Darro. Granada.
Foto del autor.

Vistas de La Alhambra desde el segundo piso del Museo Arqueológico de Granada.
Se aprecian las torres de la Alcazaba y a la izquierda de la imagen la Torre de 
Comares, símbolo de los Palacios Nazaríes. Foto del autor.


Además en esta Carrera del Darro podemos observar, perfectamente conservados, numerosos edificios de los siglos XVI y XVII, además de restos de casas árabes de época nazarí, conventos, casas palaciegas, iglesias y edificios históricos de gran importancia. Como la casa morisca Horno de Oro. Esta edificación nazarí se construyó de una sola planta y en el S. XVI se le añadió la segunda. Se encuentra en el callejón del Horno del Oro, en el barrio de Axares, hay que subir un poco desde el Paseo de los Tristes. Todo el edificio gira en torno a un patio con una pequeña alberca central enmarcado por dos pórticos con columnas nazaríes tras los que se encuentran las habitaciones principales. Hacia el exterior no existen ventanas, como en su construcción original, todo acorde con las creencias musulmanas de preservar la intimidad familiar.

Patio de la Casa Horno de Oro.
Granada. Foto del autor.
Patio de la Casa Horno de Oro.
Granada. Foto del autor.















Tras la expulsión de los moriscos la casa fue corral de vecinos hasta su compra por el estado y posterior restauración.



Entrada al Bañuelo. Granada. Foto del autor.

En esta calle no podemos perdernos el Bañuelo, son los baños árabes mejor conservados de España y uno de los monumentos más antiguos de Granada, datan del S. XI.

De los 21 baños que había en Granada, este es uno de los mejor conservados del antiguo al-Andalus y el edificio civil más antiguo de la ciudad. Una casa, remodelada en época cristiana, cuyo patio comunica con la antigua casa del guardián, constituye hoy la entrada principal. Un vestíbulo (apodyterium) da paso a las tres estancias termales: fría, templada y caliente, esta última con su hipocausto subterráneo para calentar la sala y dos pilas para el agua. Las bóvedas tienen unas claraboyas para facilitar la ventilación y regular la climatización.

Las bóvedas del Bañuelo con sus claraboyas. Granada.
Foto del autor.

Un poco más arriba la calle se ensancha en una gran plaza dominada por una vista de la Alhambra realmente impresionante. Nos encontramos en el Paseo de Los Tristes.

El Paseo de Los Tristes. Así llamado cuando marcharon por aquí los moriscos que eran
expulsados de Granada. Contemplando la Alhambra pensaban en lo que perdían.
Granada. Foto del autor.

La Fuente de los Tristes en el paseo homónimo con la espectacular estampa de la Alhambra
sobre la colina de la Sabica. Granada. Foto del autor.


En el centro del paseo nos encontramos con la Fuente de Los Tristes. Es de estilo barroco y la única fuente del S. XVII proyectada para el lugar y que hoy sigue en su sitio. Data de 1609 y fue costeada por el ayuntamiento. La fuente está hecha con mármol de Sierra Elvira.

Tapa y caña con encanto en el Paseo de los Tristes frente a la Torre
de Comares de los Palacios Nazaríes de la Alhambra. Granada.
Foto del autor.


El sitio es uno de los lugares más bellos y románticos de Granada. Si quieres disfrutar de un momento que recordaras durante mucho tiempo tomate una tapita en alguna de las terrazas del paseo, mientras contemplas el sol ocultándose entre las torres de La Alhambra.

En el próximo artículo seguiremos conociendo lugares encantadores de Granada. Desde el Paseo de Los Tristes subiremos al mirador de San Nicolás, donde nos dejaremos impresionar por las vistas sobre la Alhambra para después recorrer calles del Albaicín y visitar la catedral y la Capilla Real como colofón a nuestra visita a Granada.


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2 comentarios:

  1. La ciudad mozárabe de Granada (España). Ahí no he estado nunca, aunque he tenido ocasión. Las fotos del viaje son muy bonitas. Vaya con el plato de aceitunas con huevo frito.

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    1. Es una ciudad encantadora donde se disfruta mucho tanto, de sus monumentos como de su gastronomia. No hay que perdersela!!!!

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