lunes, 17 de junio de 2019

15.05- BERLÍN (II). ISLA DE LOS MUSEOS Y LA EAST SIDE GALLERY.


Berlín. Alemania.


Nos ponemos en marcha, hoy va a ser un día eminentemente cultural, los museos más conocidos de Alemania situados en el corazón de Berlín y la East Side Gallery (la galería del lado este) el tramo conservado más largo del antiguo muro de Berlín, convertido en una sala de exposición de arte urbano al aire libre. 
Dos imprescindibles que no podéis perderos en vuestra visita a Berlín.


El edificio de la izquierda es el Museo Nuevo (Neues) el de la derecha el Museo de Pérgamo.
Isla de los Museos. Berlín. Foto del autor.

Lado este de la isla de los museos, se ve la Galería Nacional de Arte junto al río Spree.
Berlín. Foto del autor.





- LA ISLA DE LOS MUSEOS.


La Museumsinsel es un tesoro que custodia 6.000 años de arte, objetos y arquitectura repartidos en cinco museos. La Unesco la reconoce como Patrimonio Mundial, si viajamos a Berlín, visitar alguno de sus 5 museos es algo obligado.
La isla de los museos surge de una moda de finales del S. XIX entre las monarquías europeas que deseaban mostrar sus colecciones privadas al público. El Louvre en París y el British Museum en Londres se remontan a ese período. 
En Berlín, el rey Federico Guillermo III y sus sucesores lo imitaron.
Ahora llega la pregunta que surge ante la posibilidad de visitar uno, dos, tres...¿cual elegir? vamos a exponeros un breve resumen de las joyas históricas que cada uno alberga y ya solo tenéis que decidir cuál es el que más os gustaría ver. Lo ideal es visitarlos todos, pero somos conscientes que la mayor parte de las veces el tiempo en vuestras Escapadas es limitado.


La maravillosa Puerta de Ishtar de Babilonia. Una
joya del pasado magníficamente conservada.
Neues Museum. Berlín. Foto del autor.
La entrada ceremonial que llevaba
hasta la Puerta de Ishtar de Babilonia.
Neues Museum. Berlín. Foto del autor.


























Nosotros nos decidimos por los museos que albergan los tesoros históricos más espectaculares, son dos, el museo de Pérgamo y el Neues Museum. El primero alberga el Altar de Pérgamo (no visitable por reformas), la Puerta de Ishtar de Babilonia y la puerta del mercado de Mileto. 
En el Neues tenemos los tesoros de Troya y el archiconocido busto de la reina Nefertiti.

Allá vamos, comenzamos por el más espectacular, el museo de Pérgamo.




- PERGAMON MUSEUM. EL MUSEO DE PÉRGAMO.

El palacio de Pérgamo tiene 3 alas y es un fascinante escaparate sobre el mundo antiguo. Reúne una amplia variedad de esculturas clásicas y arquitectura monumental procedente de Grecia, Roma, Babilonia y Oriente Medio, en el que destaca la impresionante y azul Puerta de Ishtar de Babilonia, la puerta de piedra del mercado de la ciudad de Mileto (la antigua ciudad griega ubicada en la costa de Anatolia, hoy Turquía) y partes de la estructura del palacio del califa de Mshatta (Jordania).


Hay que ser paciente con las largas colas, nosotros tardamos una hora y poco en entrar.
Museo de Pérgamo, isla de los museos. Berlín. Foto del autor.


Por desgracia lo más valioso del museo, el Altar de Pérgamo, se encuentra cerrado por reformas. Parece ser que aún llevara años verlo en todo su esplendor, se dice que mínimo hasta 2029. Tras 4 años de obras, la Fundación Cultural Prusiana, ha encontrado una solución para que, al menos, partes del friso de Télefo se pueda visitar, además de una instalación que réplica el resto del Altar. Esta solución temporal será un nuevo edificio que se levantará en terrenos de la propia isla de los museos que podrá ser visitada desde noviembre de 2019. Algo es algo.

Lo más espectacular del museo, sin ninguna duda es la Puerta de Ishtar de Babilonia. Fue una de las 8 puertas monumentales que daban acceso a la metrópoli bíblica.
La puerta, que estaba decorada con ladrillos de colores cocidos al horno, era parte de una construcción que también incluía el Camino Procesional que llegaba desde el norte. La calle Procesional fue construida por Nabucodonosor II entre el 604 y 562 a.C. La calle servía como entrada por la parte norte de la ciudad, y era utilizada como ruta de culto en la Fiesta del Año Nuevo, atravesaba la Puerta de Ishtar y terminaba en el puente que cruzaba el río Eúfrates. Diferentes expediciones arqueológicas alemanas entre 1899 y 1917 excavaron la sección de 250 metros de longitud que se extendían entre los altos muros de palacio y la fortificación. De esos 250 metros se encontraron 180 decorados a ambos lados con relieves de leones en colores, el animal sagrado de la diosa Ishtar y flores. En el museo de Pérgamo se reconstruyó una sección de solo 30 metros de dicha calle procesional. El ancho real de la calle era de entre 20 y 24 metros y su color azul se debe al lapislázuli lo que le da esa originalidad casi única.


Camino Procesional amurallado que llevaba desde el norte a la Puerta de Ishtar.
Museo de Pérgamo. Berlín. Foto del autor.


Camino Procesional hacía la Puerta de Ishtar en el Museo de Pérgamo.
Berlín. Foto del autor.

En salas anexas a la reconstrucción de la Calle Procesional encontraremos estatuas y relieves del Palacio de Nimrud, perteneciente al rey Ashurnasirpal II. Los relieves hablan de escenas de batallas, procesiones rituales, rendiciones de reyes enemigos y toda la parafernalia propagandística que cimenta cualquier reino y dinastía que basa su poder en la conquista de territorios vecinos. 
El relieve de la foto inferior muestra el "privilegio del rey" de la caza del león, se encontró en el ala occidental del palacio y son unas escenas recurrentes en el imaginario de la monarquía asiria. El rey junto al conductor de su carro de guerra asaeteando al animal salvaje más peligroso de la naturaleza, la civilización contra la barbarie, así se veían ellos mismos.



El rey Ashurnasirpal II en un relieve de su palacio de Nimrud cazando leones.
Museo de Pérgamo. Berlín. Foto del autor.



Los dos Lammasus de la imágen eran divinidades protectoras. Seres híbridos legendarios de la mitología
asiria que tenían cuerpo de toro o león, alas de águila y cabeza de hombre. Surgen en la
antigua asiria con la misión de proteger las puertas de las ciudades o palacios de sus monarcas.
Infundían temor y respeto a los espíritus maléficos y a los enemigos. Decía una leyenda que
eran capaces de matar a los hombres que se acercaban a sus puertas, salvo a los puramente
buenos. Estas esculturas se encontraron en el palacio de Nimrud construido por el rey
Ashurnasirpal II entre el 883 y el 859 a.C. Está situada a 30 kms. de Mosul, en la actual Iraq.
Museo de Pérgamo. Berlín. Foto del autor.


Hoy en día en el museo se exhibe una reconstrucción moderna de 15 metros de altura de la parte delantera inferior del edificio que albergaba la Puerta de Ishtar. Todas las imágenes de animales, así como el rosetón inferior y los frisos de la banda, se ensamblaron a partir de fragmentos originales tras su llegada a Berlín en 1928.
Fue construida en el 575 a.C. durante el reinado de Nabucodonosor II y una vez terminada fue dedicada a Ishtar. Ella era la diosa más importante de Babilonia, estaba asociada con la sexualidad, el amor y la guerra. El león repetidamente mostrado en la reconstrucción del Camino Procesional era uno de sus símbolos primarios. Los animales representados en la puerta representan a otros dioses principales. Como Hadad, identificado con un toro que es el dios del trueno y la lluvia. El dragón que se observa por toda la puerta es el animal que representa la deidad nacional y el dios principal Marduk. Su símbolo es un híbrido mitológico también llamado dragón babilonio (Mushhuschu) con el cuerpo de un dragón recubierto de escamas y la cabeza alargada con cuernos y lengua de serpiente, las patas delanteras de un león, las patas traseras de un rapaz y la cola de un escorpión.



El error en la forma de la Puerta de Ishtar es de la fotografía ampliada que no quedó bien.
Museo de Pérgamo. Berlín. Foto del autor.



Puerta de Ishtar y una parte de la decoración del lienzo de la muralla que llevaba
hasta ella. Neues Museum. Berlín. Foto del autor.

Los restos de la puerta original fueron descubiertos por arqueólogos alemanes durante las campañas de excavación de 1902 a 1914. En Berlín los restos se unieron para su exhibición en este mismo museo por primera vez en 1930.
Aunque no podamos conocer la joya de la corona del museo de Pérgamo, os recomiendo su visita, tanto la Puerta de Ishtar como la puerta del mercado de Mileto os dejaran con la boca abierta. No olvidéis que la audioguía es gratuita, a mí me pasó y tuve que volver a la entrada a por ella.


El autor ante la Puerta de Ishtar con su audioguía gratuita. Museo de Pérgamo.
Berlín.



Además de estas dos maravillas, no debemos olvidarnos que aquí podremos encontrar el código de leyes más antiguo de la humanidad, seguro que os suena; el Código de Hammurabi. En este museo de Pérgamo veremos una copia en plástico del original que se encuentra en el Louvre de París. Este código se encontró en Susa, capital de los elamitas, ya que estos saquearon Babilonia donde su rey Hammurabi había compilado y tallado en piedra estas normas basadas en la Ley del Talión en el año 1750 a.C. 
El código se presenta en una piedra de diorita de 2,5 metros de altura por 50 cms de ancho. En la parte alta de piedra observamos un relieve con el propio rey Hammurabi de pie ante el trono del dios del sol mesopotámico Shamash. El rey ordenó que se pusiera una piedra con sus leyes en cada plaza de cada ciudad, para que los babilonios supieran que todos se regían por las mismas leyes.


Réplica en plástico del código de Hammurabi.
Museo de Pérgamo. Berlín. Foto del autor.


El museo de Pérgamo reúne 3 importantes colecciones: la Antikensammlung (Colección de Antigüedades Clásicas), el Museum für Islamische Kunst (Museo de Arte Islámico) y el Vorderasiatisches Museum (Museo de Antigüedades de Oriente Próximo).

Al estar en reformas entraremos por una puerta lateral del museo, no por la principal. Este acceso provisional nos conducirá a la última colección que os hemos descrito, el Museo de Antigüedades de Oriente Próximo, entraremos directamente al reino babilónico de Nabucodonosor II, el gobernante más conocido de la dinastía caldea de Babilonia, que vivió del 630 a.C. a 562 a.C.
Es inevitable quedarse maravillado ante todo el arte y la monumentalidad que evoca la puerta de Ishtar, el camino procesional que conduce hasta ella y la fachada del salón real del trono. 
Toda la puerta está revestida de relucientes ladrillos vidriados de colores azul y ocre. También impresionan los leones, caballos y dragones que representan a importantes dioses babilónicos.
Junto a este tesoro de Babilonia que nos transporta a una de las civilizaciones más antiguas de Oriente Medio nos encontramos con otra maravilla, esta vez de la cultura occidental antigua más conocida, la romana. La puerta del mercado de Mileto.
Esta fachada gigantesca fue en su día (años 120-130 de nuestra era), la entrada principal para clientes y mercaderes que pasaban en tropel por su arcada hasta la plaza del mercado de esta localidad romana ubicada en la actual Turquía. La costa de Anatolia era clave para el comercio entre Asia y Europa.


Puerta del mercado de Mileto. Una de las maravillas del museo de Pérgamo.
Berlín. Foto del autor.
Entre 1903 y 1905, se descubrió los restos de la puerta entre un montón de ruinas en el curso de las excavaciones que Berlín llevaba a cabo en Mileto. Los elementos individuales de la puerta se llevaron a Berlín entre 1907/1908, y se juntaron para la reconstrucción tal como la vemos en la actualidad en 1928/1929. Alrededor del 60% de la puerta consiste en fragmentos originales, mientras que el resto está compuesto de mármol, ladrillos y yeso. El pedestal y la pared posterior fueron reconstruidos casi por completo (el pedestal original permaneció en Mileto). La puerta sufrió daños considerables por los bombardeos en la 2ª Guerra Mundial, pero fue restaurada por primera vez en 1952/1953. Una segunda fase del trabajo de restauración se llevó a cabo entre 2005 y 2008, mientras que las estatuas colosales se repusieron en 2009. La fase final de la restauración consistirá en tratar las superficies del monumento a partir de 2019.


Puerta del Mercado de Mileto y
mosaico hallado en la ciudad.
Museo de Pérgamo. Berlín.
Foto del autor.

Puerta del Mercado de Mileto.
Museo de Pérgamo. Berlín.
Foto del autor.



Maqueta del centro de la ciudad de Mileto, incluye el puerto de los leones, el Delphinium que
era el templo de Apolo, el Mercado del Norte, el Ágora, el Bouleuterion o Boule donde se reunían
los 500 que decían las políticas de las ciudades griegas, la Puerta del Mercado y el Ninfeo o
monumento consagrado a las Ninfas. Año 200 a.C. Museo de Pérgamo. Berlín. Foto del autor.
Balcón romano en la sala de la Puerta del Mercado de Mileto. Museo de Pérgamo.
Berlín. Foto del autor.


Esta puerta pertenece tipológicamente a la tradición de las fachadas romanas en teatros escénicos, fuentes y bibliotecas. En Mileto, decoró, junto con el ayuntamiento y el Ninfeo, una de las plazas más importantes del centro de la ciudad, el Ágora, y formó la entrada hacia el Mercado del Sur, la plaza más grande de la ciudad. Se han conservado fragmentos de dos estatuas colosales de la decoración escultórica original: en el lado izquierdo, un general con un bárbaro vencido a sus pies, y en el lado derecho, un héroe desnudo sosteniendo una cornucopia. Estas dos estatuas posiblemente representan a un emperador romano (Trajano o Adriano). La puerta fue donada por un ciudadano de Milesia, cuyo nombre se ha perdido. Entre los siglos VI y VIII d.C, la puerta se incluyó en las fortificaciones que rodeaban el centro de la ciudad.

En la colección islámica del primer piso, además del palacio del califa, se recomienda ver la sala de la casa de un comerciante cristiano de Alepo del S. XVII, con paredes de madera profusamente pintadas. Si uno se fija bien, se pueden distinguir La Última Cena y una Virgen con el Niño entre la ornamentación (justo enfrente, a la derecha de la puerta).


Restos de las murallas del palacio de Mshatta. Museo de Pérgamo. Berlín.
Foto del autor.

Muralla del palacio de Mshatta (palacio de invierno en árabe) sus ruinas estaban ubicadas a 30 kilómetros al sur de Amman, capital de Jordania. La construcción del palacio probablemente comenzó durante el breve reinado del califa omeya Al Walid II (743-744). Dicho palacio no se completó ya que el monarca fue asesinado y lo que quedaba de la edificio destruido por un terremoto.


- NEUES MUSEUM. MUSEO NUEVO.

El Neues Museum fue construido entre el año 1843 y 1855, el año de su inauguración. El edificio es un claro ejemplo de arquitectura neoclásica del S. XIX y uno de los primeros en utilizar arcos de acero en su estructura.


Subiendo a la segunda planta del Neues Museum. Isla de los museos. Berlín.



Durante la IIª G. M. resultó tan dañado que en algunas zonas solo se conservaron los muros exteriores, pero fue reconstruido y en el año 2009 reabierto.
Las razones principales para elegir visitar el Neues Museum, se pueden resumir en dos; Nefertiti y el tesoro de Troya. Dos referencias históricas que evocan miles de libros, óperas, decenas de películas y obras de teatro sobre dos de las civilizaciones más conocidas y populares del mundo antiguo mediterráneo. Egipto y la Grecia micénica.


Espada clásica micénica
en el Altes Museum.
Berlín. Foto del autor.
Una de las salas del Altes Museum. Berlín.
Foto del autor.








































Joyas del Tesoro de Troya.
Altes Museum. Berlín.
Foto del autor.
Joyas del Tesoro de Troya.
Altes Museum. Berlín.
Foto del autor.

























Heinrich Schliemann (1822-1890), el millonario prusiano que, tras amasar una fortuna, se dedicó a su sueño, la arqueología, pasará ya para siempre a la Historia como el hombre que descubrió Troya. Encontró un total de 17 tesoros que comprendían joyas, armas y embarcaciones. El mismo se quedó con el más importante de ellos, este tesoro comprendía un total de 8.830 objetos del legendario Rey Príamo. Schliemann se llevó dicho tesoro en secreto a Atenas, lo que dio lugar a procedimientos legales y se le exigió que pagara una indemnización de 10.000 francos de oro al entonces Imperio Otomano, donde se hallaba la excavación. De hecho, entregó tres veces esta suma, lo que significó que los hallazgos se convirtieron legalmente en su propiedad. En 1945, la mayor parte de los tesoros de Troya fueron llevados como botín de guerra a la antigua Unión Soviética, donde se encuentran actualmente la mayoría de ellos violando el derecho internacional, ya que deberían haber sido devueltos a Alemania, para ser expuestos, seguramente, en este mismo museo.


Parte de un templo en la colección egipcia del museo de Neues. Berlín. Foto del autor.



Sala de la exposición egipcia del museo Neues. Los frescos fueron pintados en el S. XIX para que los
visitantes se imbuyeran de los paisajes del antiguo Egipto mientras disfrutaban de los tesoros
arqueológicos que trajeron de ese país. Berlín. Foto del autor.


Sala de sarcófagos en el Neues Museum de Berlín. Foto del autor.


La familia Ptahmai, a la izquierda del padre su hija Inuihaj, la figura a su derecha es su esposa
Hatshepsut, la figura pequeña a la derecha del padre su hija Ptahmai. Esta hecha en piedra
caliza probablemente hecha entre 1250 y 1200 a.C. Del período posterior a Amarna XIX Dinastía.
Hallada en Saqqara. El protagonista, Ptahmai era sacerdote, pero por los collares dobles de oro
que usa está claro que debió de ser anteriormente un militar condecorado. Museo Neues.
Berlín. Foto del autor.


Troya se fundó en el tercer milenio a.C. y fue destruida por el Rey Agamenón y una confederación de griegos micénicos en la famosa guerra de Troya (1194-1184 a.C.).

En una sala muy próxima nos encontramos con la mayor joya de este museo, la estatua de la cabeza de la reina Nefertiti. La legendaria mujer reinó como segunda esposa del faraón Akenatón desde el 1370 al 1330 a.C.  Las imágenes de la reina egipcia en el artículo salen tan lejanas por qué está prohibido sacar fotos en la sala del busto. Un guardián del museo no le quita ojo durante los horarios de visita. 
Comprensible al ser un busto policromado, los cientos flases de turistas y visitantes despistados la dañarían irremediablemente, por muchos carteles avisando de no usar flases.


Sala del busto de la reina
Nefertiti. Neues Museum.
Berlín. Foto del autor.
Sala del busto de la reina
Nefertiti. Neues Museum.
Berlín. Foto del autor.



































En la foto de abajo vemos una ánfora ática con escenas de la Guerra de Troya, Neoptolemo, hijo de Aquiles tras matar al rey Príamo persigue a sus hijos, Troilo y Polyxena (550-540 a.C.).

El arquitecto británico David Chipperfield convirtió el bombardeado Neues Museum (Museo Nuevo) en la residencia de la reina Nefertiti, la mayor joya de todas las salas del Museo Egipcio, que además acoge momias, esculturas y sarcófagos.


Cabeza Verde de Berlín en el
Neues Museum. Berlín.
Foto del autor.
Ánfora con escenas de la
Guerra de Troya. Neues Museum.
Foto del autor.





























En este museo podremos ver la famosa "Cabeza Verde de Berlín". Una cabeza hecha de pizarra que representa a un hombre de mediana edad. Por no tener pelo no se cree que represente a un sacerdote. Está considerada una de las joyas más importantes del arte egipcio y se cree que data del 350 a.C., en época del Período Tardío de Egipto, durante la XXX Dinastía (378-341 a.C.). Esta dinastía es originaria de la ciudad de Sebennitos, en el centro del Delta del Nilo, fue la última capital del Egipto faraónico.


Espadas y puntas de lanza de la Edad de Bronce Tardía, con armas como estas
combatirían los héroes de los dos bandos enfrentados en la guerra de Troya.
Neues Museum. Berlín. Foto del autor.



Yelmos y hachas de guerra de la Edad del Bronce en Europa, este período abarca desde la mitad
del III milenio a.C. al año 1.000 a.C. Neues Museum. Berlín. Foto del autor.

Maravillosos ejemplos de armas celtas. Una falcata idénticas a las utilizadas en la
península ibérica, cuchillos de ceremonia y puntas de lanza.
Neues Museum. Berlín. Foto del autor.





Corona de Kerch. Neues Museum. Berlín.
Foto del autor.
Estatua de bronce de una
villa romana hallada en
el río Rin en Alemania.
Neues Museum. Berlín.
Foto del autor.



























Si seguimos avanzando por la historia de la humanidad, llegaremos a las salas de Roma. Objetos del Imperio romano jalonan sus espacios y vitrinas y una de las más valiosas es la magníficamente conservada estatua de bronce de un niño con bandeja (la bandeja no apareció). Esta estatua romana fue descubierta en 1858 por pescadores en el fondo del Rin en Luttingen, no lejos de Xanten. Sólo falta el antebrazo derecho. El joven desnudo, cuyo cabello está adornado con una corona compuesta de bellotas, espigas de trigo, uvas, amapolas, piñas y una granada, originalmente sostenía una bandeja (férculo) con ambas manos. Dicha bandeja se utilizaba para que se sirviesen la comida y la bebida en preciosos recipientes de plata los invitados a los magníficos banquetes y fiestas que se organizarían en esta villa romana de época imperial. 
La mayoría de las villas romanas estaban equipadas con tales "camareros", incluso en "provincias".
Esta escultura se realizó a finales del siglo I a.C. o a principios del siglo I d.C. y puede provenir de la fortaleza legionaria de Vetera I, que fue saqueada en el año 70 d.C. durante la revuelta de los bátavos, una tribu germánica que habitaba los actuales territorios de los Países Bajos. Está claro que una barca debió de hundirse con este tesoro en su intento de cruzar el Rin huyendo de los germanos.


Sala del Museo Nuevo. Isla de los Museos. Berlín. Foto del autor.


En la foto de al lado contemplamos la famosa Corona de Kerch. Esta diadema perteneció a una dama noble y fue descubierta en una tumba del período de migración de Kerch (península de Crimea, lugar de gran desarrollo comercial entre la vasta Rusia y Asia Menor) en la antigua ciudad de Panticapaion. Está cuajada de gemas rojas y granates, su datación la sitúa entre finales del IV d.C. principios del V d.C. Esta corona es parte de un tesoro mucho más amplio que contenía broches de plata y magníficos cinturones de tumbas medievales de Francia, Italia, España y Alemania.


Tesoros de pueblos nómadas que
habitaban las riberas del Mar Negro.
S. V d.C. Neues Museum.
Berlín. Foto del autor.
Joyas, armas y yelmos de los pueblos
nómadas que habitaban y comerciaban
en la zona del Mar Negro. S. V d.C.
Berlín. Foto del autor.



























En este mismo edificio, en el puesto de honor del Museo de Prehistoria e Historia Antigua hay un podio que, en mi humilde opinión lo ocupan, en el puesto Nº1: las antigüedades encontradas en el yacimiento de la mítica ciudad de Troya. En el puesto Nº2 la cabeza de la reina Nefertiti y en el Nº3 la Berliner Goldhut (sala 305), una suerte de corona cónica de oro de 3.000 años de antigüedad y que seguramente se utilizaba en las ceremonias para predecir las épocas más propicias para la siembra.


La Berliner Goldhut en el Neues Museum. Isla de los Museos.
Berlín. Foto del autor.


Si compráis los tickets por internet, estipulando la hora de entrada podéis evitaros las colas en la entrada.




- LOS OTROS MUSEOS DE LA ISLA.

El Altes Museum, es el más conocido por su arquitectura porque se encuentra en primera línea de la Unter den Linden, en pleno parque Lustgarten junto a la catedral de Berlín.
Lo más característico del edificio es la cortina de columnas de su fachada. Forman una portalada impresionante que da paso a su interior donde nos espera una sala inmensa inspirada en el Panteón de Agripa en Roma. Es un edificio impresionante por señorial y ejemplo perfecto de arquitectura neoclásica. 


El espectacular Altes Museum de Berlín. Isla de los Museos.
Foto del autor.


Este museo custodia una valiosa colección de antigüedades. En la planta baja se exponen esculturas, jarrones, relieves funerarios y joyas de la Grecia antigua, mientras que, en las galerías superiores se dedican a etruscos y romanos. Especial interés revisten la escultura de bronce a tamaño natural del "Joven rezando" que encontraremos en la sala 5, es el principal reclamo del museo ya que esta estatua de un joven desnudo es considerada el epítome de la perfección física, se realizó en Rodas en el 300 a.C. 
Además podremos contemplar: recipientes de plata romanos, una vitrina erótica (solo para mayores de 18 años) y los retratos de César y Cleopatra.

El Alte Nationalgalerie es otro ejemplo de edificio inspirado en un templo griego. Este museo es un escaparate de tres pisos de arte europeo del S.XIX.
Aquí encontraremos los melancólicos lienzos del pintor romántico Caspar David Friedrich, los épicos cuadros de Franz Krüger y Adolf Menzel a la mayor gloria de la Prusia decimonónica, las fantasías góticas de Karl Friedrich Schinkel y ejemplos de impresionismo francés y alemán.

Y por último tenemos el Bode Museum, en la punta norte de la isla. Este museo acoge una exhaustiva colección de escultura europea desde la Alta Edad Media hasta el S. XVIII, incluidas grandes obras maestras de Tilman Riemenschneider, Donatello y Giovanni Pisano.
Otras salas atesoran una valiosa colección de monedas y obras de arte bizantino, así como sepulcros y tallas de marfil. 

Tras todo un día llenándonos de cultura vamos a dedicar el final del día a otra clase cultura, la urbana, en este caso un arte que surgió de un conflicto entre bloques humanos enfrentados, el occidente capitalista y la europa ocupada por los comunistas rusos.

Nos vamos al lugar donde nació el arte urbano como grito de protesta ante la dictadura comunista, nos vamos a la East Side Gallery, el trozo del muro de Berlín más amplio que se conserva.



- EL MURO DE BERLÍN. LA EAST SIDE GALLERY.

La construcción del Muro de Berlín fue un suceso único en la historia de la humanidad, no solo por partir una ciudad en dos, sino también porque marcó una línea divisoria física entre ideologías y sistemas políticos antagónicos. Era la primera línea de un frente que marcó la Guerra Fría entre la dictadura comunista de la Unión Soviética y el sistema de libertades que nos dota el sistema capitalista de los países occidentales.
A más de un cuarto de siglo de su demolición, su impacto global y legado universal siguen atrayendo por su fascinación a millones de viajeros y turistas.
El inicio de su construcción fue el 13 de agosto de 1961, tenía una longitud de 155 kilómetros y una altura de 3,6 metros, cada segmento pesaba 2,6 toneladas y tenía 300 torres de vigilancia.


Para llegar a la East Side Gallery paseamos por la calle Skalitzer. Nos sorprende el diseño
decimonónico de la estación de tranvías de Gorlitzer Bahnhof. Nos encaminamos a cruzar el
puente más conocido de Berlín, el puente Oberbaum. Berlín. Foto del autor.


Nos acercamos al puente Oberbaum, la plaza donde se encuentra la estación del tranvía elevado
de Schlesisches Tor, tiene mucho encanto. Nos acercamos a la East Side Gallery.
Berlín. Foto del autor.
En Schlesisches Tor no podemos resistirnos a un delicioso muffin de queso que compramos
en una pastelería. Riquísimo. Berlín. Foto del autor.


El puente Oberbaum, es un puente de cubierta doble que nace por ser el punto de aduana
que separaba el límite de la ciudad de Berlín con su área rural circundante en 1732. El actual
puente con ese diseño gótico báltico data de 1896 y en 1902 se abrió para que lo cruzara
el tranvía de la ciudad. El puente durante la Guerra Fría dividía Berlín Oeste del Este.

 Foto del autor.

Hay varios lugares donde podremos conocer mucho mejor todos los aspectos de estas convulsas décadas, donde el muro de la vergüenza era el eje en la vida de millones de personas. 
Haremos un breve resumen para luego centrarnos en el lugar que visitaremos la East Side Gallery.
A) La Gedenkstätte Berliner Mauer, este céntrico monumento en recuerdo del Muro y sus víctimas muestra la complejidad y la naturaleza inhumana de la instalación fronteriza a los largo de 1,4 kilómetros. Este monumento os lo mostraremos en el siguiente artículo.
B) Mauerpark, el famoso mercadillo alberga un tramo de 30 metros del Muro que sobrevive ahora como lugar de prácticas de aprendices de grafiteros. En el siguiente artículo también visitaremos este mercadillo, el más famoso y grande de todo Berlín.
C) Tränenpalast, a este moderno pabellón fronterizo de acero y cristal de 1962 se le llamaba el "palacio de Lágrimas" por las muchas que se vertieron en las despedidas entre familiares que vivían divididos por el Muro.
D) Potsdamer Platz. En ningún otro lugar la franja de la muerte era tan ancha como en la antigua tierra de nadie que rodeaba Potsdamer Platz de la que brotó un nuevo barrio en la década de 1990. Una pequeña (demasiado pequeña) sección del muro sirve como recordatorio. La conoceremos en el próximo post.
E) Checkpoint Charlie. Solo los extranjeros y los diplomáticos tenían autorización para utilizar este cruce fronterizo. A las pocas semanas de erigirse el Muro, los tanques estadounidenses y soviéticos se encararon aquí en uno de los momentos más tensos de la Guerra Fría. También lo conoceremos en el siguiente artículo.
Y por último, la East Side Gallery, el lienzo más largo del Muro de Berlín que aún se conserva y que contiene los murales por los que es mundialmente conocido.


Vista desde el puente Oberbaum de la calle Muhlenstrabe donde se encuentra el
tramo del Muro más largo que se conserva.
Berlín. Foto del autor.


El lado de la East Side Gallery que da al río Spree. Anochece sobre Berlín.
Foto del autor.


En paralelo al río Spree, en la calle Muhlenstrabe, nos encontramos con un paseo de 1,3 kilómetros donde podremos disfrutar de el tramo más largo que aún se conserva del celebérrimo Muro de Berlín. Expresamente fue salvado para que se convirtiera en una galería de arte al aire libre, se la considera la más extensa del mundo.

Tras su caída, más de centenar de artistas de todo el mundo expresaron sus sentimientos ante semejante hito histórico de libertad en una serie de coloristas murales que se han convertido en todo un icono del arte contemporáneo.


Este es probablemente el mural más famoso de toda la East Side Gallery. Fue pintado en
1990 por el artista ruso Dmitri Vrúbel. Su título original es:"Dios mío ayúdame a sobrevivir
a este amor mortal", aunque popularmente es conocido como Brotherhood kiss (beso entre
hermanos). El mural satiriza la famosa fotografía del beso entre dos totalitarios dirigentes
comunistas, el ruso Leonid Brézhnev y el alemán del este Erich Honecker, durante la
celebración del 30 aniversario de la RDA en 1979. Se ha convertido en uno de los iconos
más populares de Berlín. East Side Gallery. Foto del autor.
Autofoto ante la obra del francés Thierry Noir. Se dice que fue el primer artista extranjero
que pintó en el muro de Berlín. Esta obra titulada "homenaje a la generación joven", fue
pintada en 1990. East Side Gallery. Berlín.


El autor ante la obra de la artista berlinesa Birgit Kinder. Hasta el Trabant, el que fuera icónico
vehículo construído en la Alemania comunista, deseaba romper el Muro de la Vergüenza y rodar
hacía una Alemania libre. East Side Gallery. Berlín. Foto de Araceli Hidalgo.
En la East Side Gallery. Berlín.
Foto del autor.
El bloque de apartamentos
al final de la East Side
Gallery. Berlín.
Foto del autor.









































Berlín en un grafiti de la East Side Gallery. La mayor galería de arte al aire libre del mundo.
Berlín. Foto del autor.

La galería consta de 103 murales pintados por artistas de todo el mundo que rinden homenaje a la libertad y expresan la euforia y alegría que surgió ante el fin de la Guerra Fría y el avance de un mundo mejor. Oficialmente la East Side Gallery "abrió" sus puertas al público el 28 de septiembre de 1990. En noviembre de 1991 fue reconocida como "monumento histórico protegido". Sin embargo, esta protección no ha impedido la aparición de una lujosa torre de apartamentos en el tramo final de la galería, que rompe por completo la visión del monumento.
Este monumento es uno de los imprescindibles de Berlín, a pesar de estar a unos 5 kilómetros del centro de la capital, cada año pasan por aquí 800.000 personas.

Ya es noche cerrada, en la cercana estación de trenes de Postbahnhof cogemos uno que nos acerca al hotel. 

En el próximo post disfrutaremos de nuestro último día en Berlín, al ser domingo no nos podremos perder el mercadillo de Mauerpark, el más popular de la capital. Visitaremos también el museo al aire libre de la calle Mauer que describe con murales, monumentos, restos del muro y de su zona de muerte, vehículos y un museo, el día a día en la capital germana en los años del "muro de la vergüenza" que levantó la dictadura comunista de la URSS.

Hasta pronto viajeros.



- Próximo post 15.06- Berlín (y III). Muro de Berlín, Mauerpark, Checkpoint Charlie y más.

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