sábado, 29 de agosto de 2015

8.0- Toscana, la tierra del Renacimiento italiano.


- LA TOSCANA, MECA DE CUALQUIER AMANTE DEL ARTE Y LA HISTORIA.

Cuando era niño, mi abuela me compraba cada sábado el "Don Miki", un cómic juvenil editado en España entre los años 70 y 80. Disfrutaba mucho con las aventuras y peripecias de todos los personajes de Disney. En una de esas aventuras, los principales personajes de la factoría de los sueños americana (Miki, Donald, sus sobrinos, Goofy, tío Gilito, etc.) retrocedían en el tiempo hasta la época del Renacimiento italiano con Florencia como principal teatro de operaciones. En esa increíble ciudad conocían en persona a los grandes personajes de esa época fascinante. 
Yo no tenía ni idea de qué era el Renacimiento, de quiénes eran Dante, Leonardo Da Vinci, Miguel Ángel, la familia Médici; que motivaba las guerras entre güelfos (papistas) y gibelinos (partidarios del emperador del Sacro Imperio Romano-Germánico). Quién construyó la torre de Pisa, el Duomo de Florencia, la plaza del Palio de Siena, las torre-rascacielos de San Gimignano...y tantas otras maravillas.
Desde la lectura infantil de esas aventuras siempre deseé viajar a esa tierra capaz de aunar entre sus montañas, colinas y costas tanta Historia y tanto Arte.
Por fin mi sueño de infancia se ha visto cumplido.


Amplia vista de Florencia desde el campanile de la catedral de Santa
María del Fiore (Duomo). Toscana. Foto del autor.

La Toscana es una región situada en la parte central de Italia, cubre una superficie de casi 23.000 kilómetros cuadrados. Su topografía es muy variada, presenta una zona costera arenosa que desde el norte llega hasta Livorno para luego convertirse en rocosa; una zona de colinas; la zona montañosa de los Apeninos y Alpes Apuanos, que constituyen el confín nordeste y alcanzan 1.946 metros de altura. Estos montes dominan la costa hasta Massa-Carrara y son perfectamente visibles desde las playas de la Toscana, espectacular visión incluso para el que está acostumbrado a ver los Picos de Europa desde los arenales cántabros.


Vista de los Alpes Apuanos desde las playas de Vieraggio. Toscana. Foto del autor.


- TOSCANA. UN POCO DE HISTORIA.

Las primeras huellas etruscas en Toscana son del S. IX a.C. los etruscos se organizaron en una confederación de doce ciudades-estado, independientes entre sí, que alcanzaron su punto culminante entre los siglos VII y V a.C. La decadencia etrusca comenzó con la debilidad económica, cuando la competencia de la marina y los productos griegos se volvió demasiado fuerte. A ellos vino a sumarse la derrota naval ante los siracusanos de Sicilia en la batalla de Cumas (474 a.C.)  la rebelión interna de los latinos en el 510 a.C. (futuros romanos) y las invasiones galas.


Teatro romano de Volterra (S. I a.C.). Toscana. Foto del autor.

Entre los siglos IV y III a.C., los romanos impusieron su dominio en buena parte de Italia incluida Etruria, futura Toscana. Con la caída del imperio romano la región fue invadida por diferentes pueblos barbaros hasta que en el S. VI los longobardos se asentaron de manera fija. La región se organizó en un ducado y Lucca fue su primera capital.
La dominación franca sucedió a la longobarda y a finales del S. IX los condes de Lucca obtuvieron el título de marqueses de Tuscia. A partir de 1.014 Pisa va configurando su rol de potencia naval y militar en clave anti-sarracena en el Mar Ligur y del Tirreno. En el S. XIII la decadencia de la República Pisana comienza con la derrota sufrida en Meloria ante los genoveses (1284) y por el gravoso tratado de paz impuesto por los florentinos en Fucecchio (1293). Durante el siglo XII Siena va dando vida a una república filo-gibelina que combatió largo tiempo la supremacía florentina hasta su sometimiento por los Médicis. A finales del S. XIV Florencia consiguió imponerse a todas las demás ciudades-estado toscanas. En el S. XV, en Florencia se afianzó el poderío de los Médicis, cuyo mando se perpetuó hasta transformarse en Gran Ducado en el S. XVI.


Réplica del David de Miguel Ángel en la plaza de la Señoría.
Centro de poder de los Médici. Florencia. Toscana.
Foto del autor.

El primer gran duque, Cosme I de Médicis (título que recibió del papa en 1569) se propuso conquistar y unificar la región de Toscana. Lo logró en 1555 tras someter Siena. Bajo su dominio floreció la agricultura y el comercio en Toscana. Lucca era la única ciudad que siguió siendo independiente. En el S. XVII empieza la decadencia del Gran Ducado.
En 1723 subió al trono Gian Gastone, el último gran duque de la dinastía medicea, tras él, el gran ducado pasa a la Casa de Lorena. En 1808, Toscana sufrió el dominio napoleónico y tras el Congreso de Viena vuelve a la Casa de Lorena. En 1860 Toscana decidió su anexión al Reino de Italia del que, de 1865 a 1871, Florencia fue su capital.
A principios del S. XX, la región experimentó un notable crecimiento demográfico y de expansión urbanística. Durante la 2ª G.M., Toscana participó activamente en la resistencia y tras la guerra emprendió una vasta obra de reconstrucción e industrialización.
  

- PLANIFICACIÓN DE UN VIAJE A FLORENCIA Y LA TOSCANA.

El viaje se realizó en la primera quincena de agosto de 2015, al ser temporada alta y si queremos ahorrar un poco en el avión deberemos adaptarnos a dichos vuelos. Desde Madrid tenemos un vuelo a Pisa con Ryanair, los días más baratos son los martes y jueves (unos 150 euros/persona ida y vuelta). Decido que mi salida será un martes y mi vuelta el jueves de la semana siguiente. Tengo 9 noches para conocer la Toscana, mi planing de viaje será el siguiente:


Ver atardecer sobre Florencia desde la Piazza Michelangelo es una de las maravillas que no puedes perderte
cuando visitas la capital de La Toscana. Foto del autor.


- 1er día: vuelo Madrid-Pisa con Ryanair. Desde el aeropuerto de Pisa autobús hasta la estación central de Florencia (1 hora 15 min.), 1ª noche en Florencia.
- 2º día: dedicado por completo a la capital de la Toscana, 2ª noche en Florencia.
- 3er día: la mañana por Florencia y tras recoger el coche de alquiler me desplazo a Siena, 3ª noche en Siena.
- 4ª día: desde Siena visitando Volterra llegaremos a San Gimignano, 4ª noche en San Gimignano.
- 5º día: desde San Gimignano me desplazo a Lucca, 5ª noche en Lucca.
- 6º día: desde Lucca viajo dirección La Spezia en la costa de Liguria para conocer los pueblos de Cinque Terre, 6ª noche en La Spezia.
- 7º día: por la mañana en Cinque Terre y me desplazo a Vieraggio, la inmensa playa de la Toscana, 7ª noche en Vieraggio.
- 8º día: desde Vieraggio a Torre del Lago, son pocos kilómetros, seguimos en zona de costa de la Toscana, 8ª noche en Torre del Lago.
- 9º día: desde Torre del Lago me dirijo al último plato fuerte, Pisa, devuelvo el coche en esta ciudad, 9ª noche en Pisa.
- 10º día: vuelta a Madrid desde Pisa.

En este planing, si no hubiéramos estado a 38ºC, sobraría la noche de Torre del Lago (poco que ver allí) y añadir una noche más a Siena o San Gimignano para escaparse por los alrededores. Pero con tanto calor, vino bien un par de días de mar y playa.
Ya sabéis que en Italia, además del precio por la habitación, debéis pagar al final de la estancia el impuesto de turismo. En Florencia, se cobra un euro por persona/noche y por cada estrella que tenga el establecimiento hotelero. Dos personas durmiendo dos noches en hotel de 4 estrellas son 16 euros. Toscana no es para bolsillos asustadizos. En temporada alta si no reserváis con muchos meses de antelación los precios más económicos que encontraréis serán entre 75 y 90 euros noche en habitación doble. Intentad siempre que tenga aire acondicionado.


Desayuno con vistas en el hotel Bel Soggiorno, San Gimignano. Toscana.
Foto del autor.

En muchos B&B (Bed and breakfast) los baños son compartidos. www.booking.com, para mí, es el mejor portal para encontrar alojamiento y si os registráis en la web las ofertas se notan.
Otros precios orientativos son:

- Café con hielo: 3 euros. Si es en la Plaza de la República de Florencia, 5 euros, el palo del viaje.
- Cena para dos, de un plato cada uno, bebida y pan: no menos de 25 euros (en zona turística florentina) 20/22 euros en otras zonas. El truco para ahorrar sería no pedir pan ni bebida.
- Entrada a museos, palacios y torres: 10 euros mínimo.

Aunque siempre hay agradables sorpresas, como tomarte una caña de cerveza en plena plaza del Palio de Siena por 3 euros. Las impresionantes vistas merecen la pena.


Una caña con la plaza del Palio a los pies, no tiene precio. Siena. Toscana.



El autor en la Plaza de la Señoría. Florencia. Toscana.



- CONSEJOS ÚTILES.

Esta es una de las muchas opciones de planificación que tenéis, me dejé muchas poblaciones por ver: Montepulciano, Montalcino, Anghiari, la isla de Giglio, Pitigliano... Pero la Toscana es muy grande y los días pocos. 
Asimismo encontraréis 3 o 4 museos "imprescindibles" en cada población, muchos más en ciudades como Florencia, y decenas de iglesias, torres y palacios que visitar. Estudiar antes los que os interesen más, en algunos como la Galería de los Uffizi de Florencia es imprescindible reservar por internet si queréis entrar en temporada alta. 
Mi debilidad son los sitios altos, me encantan esos lugares desde donde pueda observar la ciudad visitada o los campos circundantes. En esta Escapada he podido disfrutar de lugares impresionantes, os hago un pequeño listado:

- En Florencia: campanile y cúpula del Duomo. Torre del Palazzo Vecchio en la Plaza de la Signoria, está me la perdí.
- En Siena: la torre del Mangia en plena Piazza del Campo.
- En San Gimignano: la Torre Grossa, la más alta de todas las de este espectacular pueblo medieval.
- En Vernazza: torre de la fortaleza.
- En Pisa: campanile inclinado, la famosa torre de Pisa, está también me la perdí, 18 euros la subida.


Vista de Siena y su catedral desde la Torre del Manguia. Toscana. Foto del autor.



Para poder moverse por la Toscana donde hay tanto por ver, es muy recomendable alquilar un coche, no dependeremos de horarios de autobuses o trenes y aprovecharemos mejor nuestro tiempo. Recordaros que si alquiláis el coche en un punto y lo devolvéis en otro, tendréis un sobrecoste de unos 50 euros. Normalmente no sale reflejado cuando hacéis la búsqueda en internet. 
No gastaremos mucho en gasolina, aproximadamente unos 55 euros para los 540 kilómetros que necesitaremos para visitar nuestros destinos toscanos y llegar a la costa de Cinque Terre en Liguria. Teniendo en cuenta que circulamos a una media de 90-100 kms/h. Hay que tener cuidado con los radares aunque estén señalizados. 
Otro consejo, llevad repelente de mosquitos si vais en temporada veraniega. El mosquito tigre (que los dioses del Elíseo maldigan) ha colonizado toda la zona de la Toscana, incluida las ciudades del interior y sus picaduras te hacen unos ronchones impresionantes.


Con un Fiat Panda nos sobra para conocer los rincones de La Toscana, eso sí, con aire acondicionado
 si váis en agosto. Foto del autor.
Espectacular el Palazzo Pubblico con su Torre del Mangia en la Piazza del Campo de Siena.
Toscana. Foto del autor.
Torres medievales en San Gimignano. Toscana. Foto del autor.
Manarola en la costa de Cinque Terre. Liguria. Foto del autor.


Tenemos los vuelos, tenemos las reservas de hotel (salvo una noche que siempre dejo abierta por si se repite noche en una localidad o se descubre algún sitio nuevo) tenemos el "planing" de lo que vamos a visitar en Toscana (incluido la reserva para visitar la Galería de los Uffizi de Florencia) y tenemos el vehículo reservado. Ya solo nos queda esperar esas semanas o meses antes de la Escapada a uno de los lugares más fascinantes y, como luego veremos sobre el terreno...más visitados del mundo.


Piazza dei Miracoli (Plaza de los Milagros) Pisa. Toscana. Foto del autor.


Una última recomendación, intentar evitar la temporada alta. Visitar estas maravillas sin estar esquivando constantemente las cámaras de los chinos, los grupos de organizados japoneses o las bandas juveniles anglosajonas que piensan más en el vino barato que en las obras de arte que nos rodean...debe ser una auténtica gozada.

Comienza la Escapada-2015, Florencia nos espera.


PRÓXIMO POST: 8.1- FLORENCIA, CAPITAL DE LA TOSCANA.


domingo, 2 de agosto de 2015

7.1 - Paseando por la villa de Santillana del Mar (y II).

12 de Junio 2015. Viernes.
Santillana del Mar. Cantabria. España.


- VILLA MEDIEVAL POR EXCELENCIA.

Una de las mejores maneras de visitar Santillana del Mar es alojándonos en alguno de sus muchos establecimientos hoteleros y disfrutar paseando sin prisas entre sus calles. Tenemos donde elegir, aunque recomendaría hacerlo en alguno de los palacios y casas señoriales que nos ofrecen la oportunidad de sentirnos como un viajero del S. XVI pero con las comodidades del S. XXI, wi-fi incluido.
Algunos están en pleno centro de la villa, en la calle del Cantón, otros tienen bonitas vistas sobre la población. Solo tenéis que elegir.


El hotel Colegiata es una buena opción en Santillana del Mar. Foto del autor.
El autor desde la terraza del hotel Colegiata. Al fondo Santillana del Mar. Cantabria.

Ni que decir tiene que Santillana del Mar es para peatones, solo los residentes pueden entrar con vehículos. No hay mayor problema, tenemos dos aparcamientos a poca distancia del centro.
Si aparcamos en el parking de la Plaza del Rey el primer edificio histórico que nos encontraremos será el convento gótico de los dominicos de Regina Coeli, fue fundado por Don Pedro Velarde en 1592. En la actualidad lo regentan monjas clarisas y acoge la sede del Museo Diocesano.
Tras cruzar la carretera nos encontramos con el Palacio Peredo-Barreda, de origen indiano, fue edificado sobre alguna torre o vivienda gótica de la familia Barreda, es el más elegante de la villa. Fue construido en 1700 por Francisco Miguel de Peredo que emparentó con la familia Barreda de Santillana, fue nombrado caballero de la orden de Calatrava en 1694. Destaca el gran valor de su biblioteca, el mobiliario, sus colecciones genealógicas y sus valiosas pinturas neoclásicas. Fue reformando en el año 2.000 para convertirlo en centro cultural y sala de exposiciones.


- CALLE DEL CANTÓN.

Si seguimos bajando por Santo Domingo nos encontramos una bifurcación, la de la izquierda nos lleva a la Plaza Mayor a través de la calle Juan Infante, la de la derecha nos lleva por la Carrera del Cantón hasta terminar en la Plaza del Abad Francisco Navarro ante la majestuosa Colegiata de Santa Juliana.
Recomiendo bajar primero por esta última calle, la más larga y con más encanto de la villa. En ella nos encontramos con magníficos edificios como la Torre de los Velarde. Esta torre gótica fue construida a mediados del S.XV por García de Velarde, cabeza de uno de los grandes linajes de la villa. A principios del S. XVII sufrió una importante reforma.

Un poco más abajo nos encontramos con el Palacio de Valdivieso. Fue construido en la primera mitad del S. XVII y hoy está habilitado como un establecimiento hostelero, el hotel Altamira, uno de los sitios ideales si quieres alojarte como un auténtico caballero del XVII, rodeado de armaduras, tapices y gruesas paredes de piedra.


Calle del Cantón, la calle más conocida de la villa. A la izquierda el Palacio Valdivieso
hoy hotel Altamira, al fondo la Colegiata de Santillana del Mar.
Foto del autor.

Llegando al final de la calle nos encontramos con la Casa de Leonor de la Vega (S.XV) madre del Marqués de Santillana, Don Iñigo López de Mendoza. Ha sido completamente restaurada y en la actualidad es el hotel Casa del Marqués. 
Y al lado, la Casa de los Hombrones (S. XVII), este edificio es realmente la Casa de los Villa, pero recibe este nombre popular a causa de los dos soldados tenantes de su gran escudo nobiliario, cuyo lema reza así: " Un buen morir es honra de la vida."
Tras pasar por estas dos casonas llegamos a la esquina donde se encuentra el Museo de la Tortura, que como su propio nombre indica nos mostrará toda una serie de máquinas y aparatos de tortura usados en la Edad Media por diferentes naciones europeas.


Entrada Museo de la Tortura, Santillana del Mar. Cantabria.

Ahora nos encontramos frente al abrevadero, desde aquí la vista sobre la Colegiata es espectacular y es la imagen más famosa de toda la villa de Santillana.
Al lado del abrevadero se encuentran las casas de los Quevedo y los Cossío, en la plaza del abad Francisco Navarro. En el S. XVII eran dos casas, en la actualidad son una. 


Vista desde el patio de la Colegiata de las casas de los Quevedo y los Cossío (a la izq.)
Santillana del Mar. Cantabria. Foto del autor.



Abrevadero frente a la Colegiata de Santillana del Mar. Cantabria. Foto del autor.


- LA COLEGIATA DE SANTA JULIANA.

Ya estamos en plena plaza de la Colegiata (o del Abad Francisco Navarro), a nuestra derecha el Museo de Jesús Otero, en su jardín además de contemplar las obras del artista podemos comer ese bocata que llevamos para la tarde o media mañana. Al otro lado de la plaza contemplamos la Casa de los Abades. Construida a finales del S. XVII, perteneció a los Abades de la Colegiata, en la actualidad se la conoce como la Casa de la Archiduquesa Margarita de Austria por haber sido residencia de la Archiduquesa de Austria y Borbón. 
Y ahora contemplamos sin prisas la fachada de la Colegiata, subimos los escalones, pasamos entre sus leones de piedra y nos deleitamos en su contemplación.


La majestuosa Colegiata de Santa Juliana. Santillana del Mar. Cantabria. Foto del autor.

Se levantó en el S. XII sobre un antiguo monasterio del S. IX del mismo nombre. Se le fueron realizando diversos añadidos y reformas durante los S. XVI y XVII. Fue declarada Bien de Interés Cultural en 1889.  Si rodeamos la Colegiata por su lado Este llegamos a la plaza de las Arenas, en esta plaza contemplaremos el magnífico Palacio de los Velarde. Es el ejemplo más destacado del estilo renacentista de la villa, fue construido a mediados del S. XVI para Alonso de Velarde. La restauración más importante fue llevada a cabo en 1934.


Palacio de los Velarde. Santillana del Mar. Cantabria. Foto del autor.

La entrada a la Colegiata se hace por el lado oeste que nos lleva directamente al magnífico claustro, tiene forma de cuadrilátero irregular y cuenta con 43 capiteles esculpidos. Los capiteles historiados se concentran en la galería sur. Fueron creados entre finales del S. XII y principios del XIII.


Capitel de la galería sur del claustro de la Colegiata. Representa a un soldado atravesando con su espada a un
felino, el resto del capitel muestra a su escudero con perros, caballos y buitres llevándose los restos
de otro caballo. Santillana del Mar. Cantabria. Foto del autor.
El claustro de la Colegiata es espectacular. Al fondo la entrada a la iglesia. Santillana del Mar.
Cantabria. Foto del autor.
Claustro y torre cimborrio de la Colegiata de Santillana del Mar. Cantabria. Foto del autor.

Tras disfrutar del claustro, entramos en la iglesia, allí encontraremos los restos de Santa Juliana de Nicomedia. La joven fue martirizada en Asia Menor durante las persecuciones emprendidas por el emperador Diocleciano en el S. III d.C. y sus restos traídos en el S. IX a este lugar del reino de Asturias por algunos monjes peregrinos. En época del rey de Asturias Alfonso III (los documentos lo sitúan en el 870) se construyó una ermita bajo la advocación de la santa donde custodiar y venerar sus reliquias.


Tumba con los restos de santa Juliana de Nicomedia.
Interior de la iglesia de la Colegiata.
Santillana del Mar. Cantabria. Foto del autor.

El templo de la Colegiata de Santillana del Mar es un edificio de tres amplias naves separadas por arcos formeros de medio punto sobre pilares cruciformes con medias columnas en sus caras externas. El abovedamiento de los ábsides es el habitual en el románico y también el del transepto con bóveda de medio cañón. Los relieves de la iglesia, el Pantocrátor y la pila bautismal son del S. XI.


Órgano de la iglesia de la Colegiata de Santillana del Mar.
Cantabria. Foto del autor.


- LA PLAZA MAYOR.

Saliendo de la Colegiata y subiendo de nuevo por la calle del Cantón, salimos por la calle Racial para llegar a la Plaza Mayor de Ramón Pelayo.


Plaza Mayor de Santillana de Mar. Cantabria. Foto del autor.

Al final de la cuesta de la calle Racial nos encontramos con la impresionante Torre del Merino, esta torre medieval gótica de carácter militar se construyó en el S. XIV y era la sede del Merino, el representante del rey. En el año 1209 se concedió a Santillana del Mar la capitalidad de las Asturias de Santillana, la jurisdicción más grande de Cantabria en la Edad Media. 



Torre del Merino, Plaza Mayor de Santillana del Mar. Cantabria. Foto del autor.

En la amplia plaza nos encontramos con la torre medieval de Don Borja construida en el S. XV, fue restaurada en 1981 para convertirse en sede de la fundación Santillana, haciéndose merecedor del premio Europa Nostra.
En la plaza también se encuentra el ayuntamiento, la casona es de principios del S. XVIII, en 1833 se convirtió en el ayuntamiento de la ciudad. Detrás del Ayuntamiento nos encontramos con uno de los dos Paradores Nacionales que tiene Santillana del Mar.


Ayuntamiento de Santillana del Mar, Plaza Mayor. Cantabria. Foto del autor.
Parador Nacional de Santillana del Mar en plena plaza Mayor. Cantabria. Foto del autor.

En esta Plaza Mayor también nos encontramos con la Casa de los Barreda Bracho (finales del S. XVII) hoy Parador Nacional Gil Blas.
Frente al Parador podemos contemplar las Casas del Águila y la Parra, la de la Parra data del S. XVI y obtiene su nombre de la planta que adornaba sus muros, y la del Águila por el escudo de su fachada del S. XVII. En la actualidad las dos casas sirven de centro cultural donde se realizan exposiciones.


Casa del Águila (izq) y Casa de la Parra, plaza Mayor de Santillana del Mar. Cantabria.
A sus pies el monumento al bisonte. Foto del autor.

Saliendo de la Plaza Mayor y por la calle Juan Infante nos encontramos de nuevo en el inicio de nuestro paseo, la calle Santo Domingo. Ya es hora de comer algo.


- DONDE COMER.

En Santillana del Mar hay infinidad de restaurantes, muchos de ellos perfectamente ambientados en la arquitectura medieval de la villa. Que decir tiene que hay menús para infinidad de bolsillos, la media del menú es de 12 euros y entre restaurante y restaurante puede variar mucho la calidad. 
Os voy a recomendar uno en el que la calidad no falla. Se encuentra al inicio de la calle del Cantón y está ubicado en una casona montañesa con mucho encanto, es el restaurante "Pasaje de los Nobles". Que aproveche.


Restaurante "Pasaje de los Nobles". Santillana del Mar.
Cantabria. Foto del autor.


Tarta de chocolate, restaurante "Pasaje de los Nobles". Santillana del Mar. Foto del autor.

Ya seáis cántabros o vengáis de fuera de nuestra comunidad autónoma, Santillana del Mar os sorprenderá. Yo recomendaría visitarla en temporada baja o darse un paseo entre semana y para disfrutar de ese ambiente medieval sin estar rodeado de turistas.
Caminar sin prisas sobre sus centenarias piedras, contemplar los blasones de las casonas nobiliarias y disfrutar de la magnífica gastronomía de sus restaurantes es un placer que no podéis perderos. Además los productos de la tierra os están esperando: cremas de orujo, sidra de Cantabria, sobaos, quesadas, quesucos, chocolates de infinidad de sabores, carne de ternera del país, cocido montañés...


Cocido montañés en Santillana del Mar.
Buen provecho. Foto del autor.


¡¡¡¡¡ Disfrutad de Santillana del Mar y buena Escapada!!!!!


PRÓXIMO POST: 8.0: ESCAPADA 2016. FLORENCIA Y LA TOSCANA.